El pasado 15 de octubre Provea celebró un aniversario más. Son 26 años de trabajo, esfuerzo y dedicación por la reivindicación de los derechos humanos de todas y todos pero especialmente de los más vulnerables.
Ejemplo de ello es el caso de los sobrevivientes y familiares de las víctimas de la Masacre de El Amparo, quienes justamente este mes, el 29 de octubre, cumplen también 26 años recordando ese fatídico día en que 14 pescadores fueron asesinados. Militares y policías que integraban el Comando Específico “José Antonio Páez” y el gobierno de turno justificaron el ataque alegando que se trataban de guerrilleros. Wollmer Pinilla y Augusto Arias sobrevivieron a la masacre y con ellos la verdad sobre lo sucedido.
Fue apenas transcurridos 14 días de fundada Provea que ocurrió la masacre, y desde un primer momento, la organización empezó a ayudar a las víctimas en la búsqueda de la justicia. Para esto, fue necesario llegar hasta instancias internacionales al no encontrar más que impunidad en las instancias nacionales. Es así, como en fecha 11 de enero de 1995 La Corte Interamericana de Derechos Humanos dictó la primera sentencia a favor de las víctimas en un caso de violación a Derechos Humanos en Venezuela. Las reparaciones fueron establecidas después por esta misma Corte, fijó el monto de las indemnizaciones por el daño moral causado a las víctimas, ordenó que se continuara con las investigaciones y que se sancionara a los responsables.
Lamentablemente el Estado solo cumplió a medias lo dispuesto en la decisión. Si bien indemnizó a los familiares de las víctimas y a los sobrevivientes, desestimó la importancia que tiene para las víctimas que todos los culpables sean juzgados y condenados. Aún hoy día la sanción a los autores materiales e intelectuales sigue vigente.
Los testimonios de familiares de las víctimas recabadas por Provea en El Amparo a 25 años de la Masacre así lo reflejan: Moira Guerrero consideró que “Estos hechos deben ser definitivamente aclarados y las personas que cometieron esta masacre deben ir a la cárcel, El Amparo no puede quedar impune” Por su lado Noira Modesta López reclamó “Queremos justicia. Mataron a padres de familia, quedamos las viudas por allí con nuestros hijos, recibiendo humillaciones. Mataron a 14 pescadores, como pueden seguir libres como si no hubiera pasado nada”.
Provea, hoy como en aquel entonces, sigue acompañando a las víctimas de esta masacre con quienes comparte la necesidad del fin de la impunidad y la reivindicación de la verdad.
Así como este caso donde 14 pescadores de un humilde poblado del Estado Apure perdieron la vida, Provea ha abogado, en el transcurso de estos 26 años, por los derechos de estudiantes, personas de la tercera edad, soldados, policías, sindicalistas, refugiados, niños y niñas, indígenas entre otros quienes dieron rostro a las víctimas de una situación en común: la violación de sus derechos y búsqueda por la verdad y la justicia.
Abogada del Programa de Exigibilidad de Provea.
@gsikdb