Otro bebé que habita en las márgenes del vertedero de basura de Cambalache falleció ayer de neumonía en el Hospital Dr. Raúl Leoni de Guaiparo. Esta criatura se suma a los cinco pequeñitos aborígenes que han muerto en 11 días. La situación de los indígenas se complica, pese a que las autoridades médicas reiteran su constante presencia en estas zonas, sus habitantes manifiestan que no han sido tomados en cuenta por los entes responsables de brindar ayuda.
*“En Cambalache no existe medicina preventiva para la comunidad Warao, hace tiempo que dejaron de hacer operativos de salud semanales”, indicó el sacerdote holandés, Guillermo Van Zeland, representante del Grupo Cambalache.
*“(Los niños) están hospitalizados, no están muriéndose”, comentó la diputada indígena del CLEB, Yaritza Aray.
*“Estamos molestos porque el doctor dijo que era culpa de la comunidad la muerte de esos niños, por como vivíamos (…) somos humanos, no animales”, manifestó Pedro de la Rosa, capitán indígena en Cambalache.
*“Desde aquí hemos hecho todo lo posible por la alimentación de estos niños, pero hay que tener en cuenta la otra cara de la situación (los waraos) venden los alimentos y no hay un control que se pueda garantizar”, señaló Carolo Somera, Viceministro de Pueblos Indígenas.
*“Una muerte anticipada -un niño de 11 años-, sumadas a las muertes -anticipadas también- de los niños waraos hace pensar que el vía crucis de los pobres en Venezuela no se vive el Viernes Santo. ¿Nos vamos a quedar de brazos cruzados?”. Luisa Pernalete, educadora de Fe y Alegría.
Natalie García
Diogelis Pocaterra
Foto William Urdaneta
La pequeñita de 8 meses es la sexta víctima de la etnia warao que fallece en apenas 10 días.
Aunque las autoridades niegan que los decesos sean a causa de la desnutrición y las precarias condiciones en las que viven los aborígenes, la comunidad denuncia que en parte toda esta situación es originada por la pobreza extrema que los obliga a subsistir del reciclaje en el vertedero municipal de Cambalache.
La noticia sobre el deceso de otro menorcito no se supo sino hasta la tarde. En la misma localidad no estaban informados de lo ocurrido pese a que la bebé quedó sin vida a las 6:00 de la mañana.
Personas que están haciendo el seguimiento del estado de los niños hospitalizados fueron al centro de salud a verificar si todo estaba bien y el personal de guardia no reportó la novedad de la muerte.
Para el asombro de los representantes de fundaciones que están colaborando con los indígenas desde hace años, ya todo estaba casi listo para el entierro de la pequeña, que según el diagnóstico médico, pereció a causa de una neumonía.
Mientras esto ocurría funcionarios públicos han estado llamando a la comunidad de waraos de Cambalache, para amedrentarlos y pedirles que no sigan declarando a los medios de comunicación sobre el caso y sus carencias. No obstante, los aborígenes aseguran que seguirán en la lucha.
Pedro La Rosa, capitán del sector que tiene más de 11 años en esa área, dijo indignado que lejos de ofrecer soluciones las autoridades parecen tratarlos como “animales”, sin ningún tipo de consideración.
Señaló además que lo dicho por el jefe del Distrito Sanitario Nº 2, Manuel Maurera, era “mentira” porque el organismo no fue la semana pasada a vacunar a los niños y no ha ido con frecuencia a darles atención médica.
“Estamos molestos porque el doctor dijo que era culpa de la comunidad la muerte de esos niños, por como vivíamos pero eso no es así, ellos tienen que prestarnos la colaboración, somos humanos como los demás, no animales como pareciera que nos tratan, tenemos derechos, y sólo pedimos que nos atiendan como tiene que ser, porque nuestros niños se están muriendo, porque estamos mal y nunca antes esto había pasado aquí”.
Realidad inaceptable
El sacerdote Guillermo Van Zeland también desmintió las declaraciones hechas por Maurera, quien aseguró que los pequeños waraos fallecieron por diarrea y afecciones respiratorias severas.
El párroco, encargado de la atención de los indígenas en la localidad próxima al vertedero municipal, expresó que los menores murieron por desnutrición, al mismo tiempo negó que la semana pasada Sanidad haya visitado la comunidad.
“En Cambalache no existe medicina preventiva para la comunidad Warao, hace tiempo que dejaron de hacer operativos de salud semanales, cuando los indígenas van al ambulatorio les llenan las manos de órdenes médicas y muchos no saben leer ni escribir”.
Aseguró que no existe transporte para trasladar a los aborígenes a los centros asistenciales, siendo llevados a éstos por él y habitantes del sector que colaboran.
“Nosotros mismo tenemos que llevarlos a los hospitales, o CDI, hace un mes se enfermaron 20 indígenas con paludismo, nosotros los llevamos para que fueran atendidos, además el sitio donde habitan no cuenta con las condiciones aptas para vivir”.
Van Zeland pidió que se ocupen con más seriedad de la situación que afecta a la comunidad Warao en Cambalache, “estas personas no pueden seguir viviendo de la basura, no tienen agua potable y los que viven en la orilla del río se alimentan de basura y agua contaminada, es momento de hacer algo porque este es un problema serio”.
El eclesiástico muy indignado por la sexta muerte en la comunidad, dijo “no acepto la burla, se ríen de la gente y se trata de tapar lo que pasa. La niña se murió a las 6:00 de mañana y ya casi en la tarde tenían todo listo para el entierro, cuándo se ha visto eso, lo que quieren es ocultar y es inaceptable”.
Realidades inocultables
Correo del Caroní contactó vía telefónica a la diputada indígena del Consejo Legislativo del estado Bolívar (CLEB), Yaritza Aray, para saber su opinión al respecto y si el tema sería tratado en una sesión, luego de soltar una risa burlona, la funcionaria explicó que será el jueves cuando dará un pronunciamiento, muy probablemente en Ciudad Bolívar.
Al comentarle que otro niño había fallecido este martes, dijo que “tengo entendido que el Instituto de Salud Pública se instaló en la comunidad”. Al reiterarle que el ISP no estaba instalado pero sí había hecho un operativo de vacunación y que habían otros seis niños hospitalizados expresó “están hospitalizados, no están muriéndose”.
Luego de esto comentó que “si la comunidad quiere que nos pronunciemos nosotros nos pronunciamos, pero es que ya se están atendiendo, están en un centro de salud, lo que pasa es que el descuido ha sido muy largo. Yo ahorita, no conozco, o sea la situación la conozco, pero voy a convocar una rueda de prensa el día jueves, creo que en Ciudad Bolívar”.
El presidente del Instituto Indígena del estado Bolívar, Álvaro Fernández, no sabía tampoco en detalle de la realidad de los waraos que en diez días han tenido que enterrar a seis de sus niños.
Indicó a este rotativo que se “asesoraría primero” antes de hacer cualquier pronunciamiento.
El viceministro de Pueblos Indígenas, Carlos Somera, también fue consultado sobre el drama de los waraos. “Me acabo de enterar, no tengo conocimiento suficiente de la situación, estoy pidiendo el informe a salud indígena para que me reporte lo que ha sucedido pero más allá de todo eso desde el ministerio siempre hemos intentado concientizar a las instituciones así como a las empresas básicas que hacen vida en Puerto Ordaz con las reuniones interinstitucionales, para que cada una de las instituciones en materia de salud, educación y otras áreas se activen, y por eso hemos hecho varias reuniones”.
Agregó que aunque muchas veces intentan coordinar desde Caracas algunas convocatorias para tratar el tema de los indígenas en el municipio Caroní y otros donde también tienen su alcance las empresas básicas “los presidentes muchas veces no asisten a esas reuniones, es justamente por eso, lo que significa un llamado para que profundicemos la atención a estos hermanos indígenas y nosotros desde aquí hemos hecho todo lo posible por la alimentación de estos niños pero hay que tener en cuenta la otra cara de la situación, la mayoría de las veces la mentalidad de los waraos cuando se les da comida venden los alimentos y no hay un control que se pueda garantizar”.
Visita oficial
El viceministro de Pueblos Indígenas Carlos Somera, quien es de la Gran Sabana, aceptó que sí hay “discriminación” de los aborígenes que cuando acuden a algunas instituciones son ignorados y muchas veces echados a un lado.
Anunció que hoy irá a la comunidad de Cambalache a entrevistarse con los representantes y a constatar la situación, porque si bien el Ministerio del Poder Popular de los Pueblos Indígenas tiene recursos propios éstos no alcanzan para cubrir todas las necesidades de las casi 2.500 comunidades que hay en el país y que también están críticas.
Comentó que en otros rincones del estado Bolívar, como el municipio Cedeño donde estuvo de visita recientemente, se presentan realidades similares, los indígenas sobreviven de los vertederos de basura en las más precarias condiciones y no tienen las atenciones que requieren para no permanecer sumidos en la pobreza.
En Caracas los diputados a la Asamblea Nacional por el estado Bolívar, pertenecientes al bloque opositor, informaron que tratarán el tema en el hemiciclo en la próxima sesión pautada.
Natalie García
Fuente: Correo del Caroní 13.04.2011 |