La huelga que los 1.380 obreros de la planta de Coca-Cola en la ciudad venezolana de Valencia (centro) iniciaron el viernes se extendió este miércoles a los 1.450 de la planta de Maracaibo (noroeste), anunció el sindicalista Sixto Materán según informó la agencia Efe.
El secretario general del sindicato de Coca-Cola de Caracas agregó en declaraciones telefónicas a Efe que de mantenerse el conflicto en esas dos ciudades se reunirán «todos los representantes de los trabajadores de las otras dos plantas y de las decenas de distribuidoras para analizar» si se apoyan ambas medidas de fuerza.
«Las partes están negociando, no hay ruptura del diálogo, por lo que confiamos en un acuerdo», añadió Materán y confirmó que el principal punto de desacuerdo para la firma del contrato colectivo tanto de Valencia como de Maracaibo es el 55 % de alza salarial que reclaman los obreros.
Los responsables de Coca-Cola ofrecen una tercera parte del monto reclamado por los trabajadores, que en el caso de Valencia reciben en la actualidad un ingreso diario equivalente a entre 16 y 40 dólares.
Los 750 trabajadores de las otras dos plantas productoras, la de Antímano-Caracas (250) y la de Barcelona (500), así como los más de 4.000 de las distribuidoras y otras dependencias repartidas por el país, «no estamos en huelga, pero es como si estuviéramos, porque está situación nos afecta a todos», subrayó Materán.
La empresa se ha limitado a informar que la huelga, que conlleva «un riesgo de desabastecimiento de agua, jugos, gaseosas, té y otras bebidas a nivel nacional», fue desencadenada por reclamos salariales «que elevarían el costo laboral por encima de 150 %».
Así lo destacó un comunicado de Coca-Cola, que el mismo viernes pasado dio cuenta de breves paralizaciones laborales registradas en diciembre, las que generaron «daños económicos» durante ese mes por el equivalente a 23 millones de dólares.
Está «en riesgo», agregó el comunicado de la empresa, «la estabilidad laboral» del total de 8.000 trabajadores de Coca-Cola en Venezuela y de los más de 20.000 empleos indirectos que genera.
«Además de generar desabastecimiento» de los productos de su oferta, la huelga también «afecta de forma significativa» a los proveedores, especialmente de azúcar, «y altera los procesos productivos de industrias de envases, tapas, etiquetas, entre muchas otras», insistió la empresa.
Coca-Cola en Venezuela pertenece a Femsa, de México, que embotella, distribuye y vende los productos de la marca registrada The Coca-Cola Company en México, Guatemala, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Venezuela, Colombia, Brasil y Argentina.
También vende en Venezuela cervezas, jugos y agua embotellada, «producto vital este último -remató Materán- que por sensibilidad social se sigue produciendo en Valencia y Maracaibo, pese a las huelgas en esas dos plantas».
20.01.11 El Universal