Los orígenes químicos de la contaminación del embalse Pao-Cachinche no han cesado y el Ministerio del Ambiente tiene responsabilidad en esto, opina el director de Desarrollo Técnico y Asesoría Ambiental del Movimiento por la Calidad del Agua, Manuel Pérez Rodríguez.
El especialista en descontaminación de aguas desglosa al menos tres de estos orígenes: la generación de lixiviados al vertedero a cielo abierto de La Guásima; la disposición final de lodos resultantes del proceso de potabilización en la planta Alejo Zuloaga; y las descargas agropecuarias y de aguas servidas no tratadas.
Pero la causa que Pérez Rodríguez considera más importante es el trasvase de aguas desde el Lago de Valencia hasta Pao-Cachinche, la fuente de almacenamiento de la ciudad. En el Movimiento consideran esto «delito ambiental» y han presentado pruebas de valores que se dispararon luego de esta medida, tomada por Min-Ambiente e Hidrocentro en 2005.
El trasvase se mantiene a la fecha, pese a que el Consejo Legislativo sugirió cesarlo y la «Comisión del Agua» lo considero negativo para la calidad del líquido de consumo humano, en julio pasado.
«Si todos los causantes de contaminación siguen vigentes, mal podemos nosotros pensar que el embalse va a aportar un agua en capacidad de ser potabilizada», concluye el ex presidente de Hidrocentro.
Al embalse (fuente de almacenamiento hídrico de la Gran Valencia) también corre lo que egresa de las plantas de tratamiento de aguas residuales La Mariposa y Los Guayos. De ellas el agua sale prácticamente como entra, según el especialista. «Se encuentran en estado deplorable». El Movimiento ha denunciado que en la primera persisten «vertidos ilegales» hacia Pao-Cachinche.
Comisión desaparecida
Desde el 8 de octubre pasado, cuando aprobaron el diagnóstico oficial sobre la calidad del agua en el área metropolitana de Valencia, cesaron las plenarias de la Comisión Coordinadora Estadal de Ambiente, Recursos Naturales y Ordenación del Territorio. «Pareciera que la única misión que se propusieron fue generar un informe que maquilló los resultados de una manera descarada», objeta Pérez Rodríguez.
Los análisis de tres laboratorios gubernamentales arrojaron valores permisibles en la norma en 24 de 28 hogares de la ciudad. El sanitarista no ve válidas las conclusiones, porque se basaron en un muestreo hecho en época de lluvia y por un solo día.
Entre las 68 recomendaciones del documento resalta la necesidad de acondicionar las plantas. «El Ministerio del Ambiente es el principal responsable de que los valencianos no contemos con un agua potable y que no se vislumbre la implementación de ninguna de estas soluciones», remata Pérez Rodríguez.
La Mata y Punta Redonda sin respuesta
Vecinos de La Mata y Punta Redonda, al sur de Maracay, han informado al Movimiento sobre la tensión que viven por el aumento de nivel del Lago de Valencia. Manuel Pérez Rodríguez recuerda que todavía un grupo no ha sido indemnizado por el Gobierno Nacional y califica de crítica la situación que viven unas mil familias. (Daniel Pabón, El Carabobeño, 16.03.11)