El año pasado el déficit habitacional en el país fue de alrededor de 2 millones de viviendas, si en cada unidad viven en promedio 4,4 personas, según cálculos de la Cámara Venezolana de la Construcción, esto se traduce en que 8,8 millones de venezolanos no tenían vivienda propia.
El gremio añade que 1,3 inmuebles necesitaban el año pasado mejoras o reparaciones, lo que se traduce en que 5,7 millones de personas vivían en inmuebles en mal estado. En total, 14,5 millones de personas en el país tienen necesidad habitacional. “De cada 2 venezolanos 1 no tiene alojamiento adecuado o vive arrimado o hacinado, o en ranchos o albergues de alta precariedad”, señala el estudio de la cámara.
Juan Francisco Jiménez, presidente del gremio, dijo que si el Gobierno destina en la Ley de Presupuesto de cada año recursos equivalentes a 3% del producto interno bruto del país y se conservan los aportes anuales de la banca, a través de la cartera hipotecaria obligatoria -monto que calcula en 15,7 millardos de dólares, de los cuales el Estado aportaría 10,9 millardos de dólares y el privado 4,8 millardos de dólares- se podrían construir 200.000 viviendas anuales. Se beneficiarían a 600.000 familias y se mantendrían aproximadamente 1,2 millones de empleos.
“En 2010 se dedicó menos de 1% del PIB para la edificación de inmuebles. El año pasado subió un poco debido a la Gran Misión Vivienda, pero aún no es suficiente. Es un programa en el que el sector privado no es tomado en cuenta”, indicó.
Estadísticas de la Cámara de la Construcción demuestran la exclusión. En el tercer trimestre de 2011 -últimos datos disponible- el sector público construyó 30.850 viviendas, 418,2% más que en el mismo periodo del año anterior, cuando levantó 5.953 unidades. El privado fabricó 16.794 viviendas, 40% más que las 11.995 que edificó en el tercer trimestre de 2010.
“Para la construcción de las 200.000 viviendas deben instrumentarse políticas públicas que garanticen anualmente el suministro de 400.000 toneladas de acero y 2 millones de toneladas de cemento, y la habilitación de 4.000 hectáreas de tierras urbanas bajo un programa de macro-urbanismos y parcelas equipadas con todos los servicios básicos y comunales”, agregó.
Jiménez instó al Ejecutivo a implantar un indicador nacional de costo de vivienda, diseñado y emitido periódicamente por el Banco Central de Venezuela que se dedique exclusivamente a atender al sector vivienda y hábitat e impida la incertidumbre y escenarios especulativos en los precios de venta de las viviendas.
En caída y retrasado
Jiménez aseguró que en los últimos 2 años la inversión del sector privado se ha contraído significativamente. Afirmó que la merma es superior a 50%, y la atribuye a la inseguridad jurídica, regulaciones, ocupaciones, expropiaciones y a la escasez de materiales, básicamente de cemento y cabillas.
Recordó que los ataques por parte del Gobierno, que sufrieron varios empresarios del sector a finales de 2010 e inicios del año pasado, es la principal razón para que cada vez haya menos proyectos inmobiliarios en curso. El presidente de la cámara señaló que las obras que están en proceso actualmente son las que se comenzaron hace años, aunque no precisó el período.
“Ahora hay muchos proyectos con los permisos aprobados pero están engavetados, porque los promotores tienen temor a iniciar nuevas obras por la inseguridad jurídica que vive el sector”, dijo Jiménez.
A propósito de los inmuebles que edifica el sector público, agregó que están muy retrasados. “Ellos no están exentos de todas las trabas que enfrenta el sector privado, como la falta de materiales y los conflictos laborales”, afirmó.
Aunque apoya las cifras del sector que distintos funcionarios del Gobierno han anunciado, advirtió que no todas corresponden a la construcción de nuevas viviendas. Indicó que, según el ministro de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, en 2011 se construyeron 146.634 viviendas, pero 46.264 corresponden inmuebles mejorados o reparados, no nuevos. En lo que se refiere a edificaciones, dijo que el Estado hizo 56.547 mientras que el privado 43.823 inmuebles. (Carmen Alfonzo, El Nacional, 14.03.12)
El Nacional descubrió el agua tibia, Uds se pueden imaginar acabar de un plumazo o sopetón la pobreza y miseria generada por mas de 40 años, desde la dictadura de Gomez, amaino con Perez Jimenez y recrudeció de forma vertiginosa en los pseudos gobiernos democráticos desde el año 1960 hasta 1998, Uds no se acuerdan que colocaban a los pobres en trailers, autobuses y carpas por años sobre todo en los gobiernos nefastos de CAP , en esto los copeyanos fueron mas humanistas.