Visitar una morgue nos pone en relación directa con el drama que diariamente viven muchas personas en este país. Una energía adolorida lo impregna todo. Los cuerpos hablan y quienes esperan los cadáveres muestran su abatimiento entre un estar amoroso y un alcanzado por la desgracia. El dolor que recorre las historias de la vida perdida en medio de la desesperanza va cargándose de la indignación que produce la sinrazón de las balas perdidas y encontradas. La gente suele hablar poco y cuando lo hace dice que no espera nada parecido a un acto de justicia.
Este ambiente tiene la facultad de traer a la memoria que aproximadamente cada media hora es asesinada una persona, y en un solo año se puede llegar a una cifra de 18.000 o más asesinatos. Por eso suena extraño que Venezuela sea el segundo país de Latinoamérica donde sus ciudadanos (sic) son más felices,
y ocupe el puesto 19 entre los 150 países participantes en el estudio realizado (2012) por el Instituto de Tierra de la Universidad de Columbia en los Estados Unidos, denominado World Happiness Report (Reporte de Felicidad Mundial),
, cuando el tema violencia – inseguridad está tan presente en la vida de los y las venezolanas, en la medida que afecta todos los ámbitos de la vida.
La felicidad que supuestamente nos embarga es entonces preocupante, porque en el reporte no se trata de indagar sobre un momento de felicidad, sino de una manera de comprender y asumir la calidad de vida, inseparable de los derechos ciudadanos y humanos.
Frente a los casos de violencia que ocurren diariamente, el hecho de desligarse de ellos como ciudadanas y ciudadanos, podría entenderse como el resultado de una falta de empatía , una interpretación muy inquietante si consideramos la suma de felicidad reportada y el contraste con la violencia, la inseguridad y la impunidad.
¿Será que las personas encuestadas, con eso de que la idiosincrasia venezolana es una cuestión en la que desborda el buen humor a pesar de todo, la capacidad de reírse de los vivos y los muertos y la de rumbear y festejar con son o sin son, las respuestas fueron dadas desde ese lugar, sin conectarse con la tragedia que representa la violencia en todas sus manifestaciones?
¿Cuándo tanta gente dice que aquí la vida no vale nada, o que a mi hijo lo mataron como a un perro, se puede ser feliz ? El asesinato de Suami Polanco, una mujer de 22 años y con 5 meses de embarazo , – reportado en prensa el 3 de junio- quien recibió un balazo en una parada de autobús durante un enfrentamiento entre hampones y policías en Caucaguita ¿ y , el rostro agobiado de María Esther Moreno , la madre de Suami ?, o el de Zuleima Gutiérrez con un cartelito con la foto de un bebé ; es la tía de Servi Yohana , la mujer que apareció “salvajamente golpeada “ en Camurí Chico, en el Edo Vargas , y sin el bebé de 10 meses que cargaba en sus brazos … Solo por nombrar a dos mujeres afectadas severamente por hechos de violencia la semana pasada , nos permite hablar sororalmente desde la compasión y el desconcierto indignado. Nos quedan por nombrar al resto de las víctimas semanales, unas doscientas quizás …
¿Es usted feliz? Sí , claro. Sí, mucho. ¿Le han matado a alguien de su familia? Si. ¿ Le han matado a alguien de su familia? No, todavía no. Algo nos debe estar pasando con tanta felicidad. Tanta que entra en sospecha. Pudiéramos pensar que hemos ingresado a un proceso de irrealidad y despersonalización que encubre el miedo y la resignación . Si no nos damos cuenta que este es un problema de todas y todos es poco lo que podemos tener como respuesta colectiva
Fuente : www.forosperu.net › Sociedad › Actualidad Mundial
Jurisprudencia
El lunes 07 de mayo de 2012, fue dictada una sentencia condenatoria por el Tribunal Segundo de Primera Instancia en Función de Juicio de Violencia contra la Mujer del Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas, a favor de una de las usuarias del Instituto Metropolitano de la Mujer de Caracas , quien informa de este caso.
Lo significativo de este hecho y lo importante del contenido de la sentencia , es que fue aceptada la denominada violencia psicológica como plena y única prueba, consagrada en el artículo 15, Ordinal 1º de la Ley Orgánica Sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, la cual siempre ha sido manejada con cierta reserva por parte de las y los juzgadoras/es , por el contenido subjetivo que la misma conlleva.
En efecto, una evaluación psicológica de esta naturaleza requiere de una o un profesional especializada/o y sensibilizado/a en materia de violencia de género, cuyo informe pueda plasmar y transmitir aquellos actos capaces de atentar contra la estabilidad emocional y psíquica sentidos por la víctima, los cuales comportan una lesión del derecho de la víctima a actuar y decidir con libertad.
Divulgar estos casos y estudiar la jurisprudencia que se va construyendo nos ayudará a darle mayor aplicabilidad a la ley.
CASO DE CASOS
Yuli quiere denunciar a una amiga que la agredió físicamente. Ambas trabajan en un puesto de frutas y se agredieron por asuntos de vieja data relacionados con un pequeño préstamo, sumados a la incitación de los vecinos por sus ganas de ver pelear a dos mujeres. Un hecho penoso que no debía haber ocurrido.
Yuli dice que la “ley de la violencia de las mujeres “- asi la llama, la protege. Se le explicó que podía denunciar a su agresora, pero que su situación no está contemplada en la ley que ella mencionó.
Ante este hecho se debe aclarar: La ley orgánica sobre el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, define muy claramente lo que se entiende por violencia de género cuando en el Artículo 14 nos dice que es “todo acto sexista que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual, psicológico, emocional, laboral, económico o patrimonial…..”. Cuando se refiere a un acto sexista es porque específicamente la ley tipifica como delito de violencia aquellas formas de agresión que pueda recibir una mujer por el hecho de ser mujer, el sujeto activo (actor del delito) la agrede por ser mujer. “Se trata pues, de una violencia que se dirige sobre las mujeres por ser consideradas, por sus agresores, carentes de los derechos fundamentales de libertad, respeto, capacidad de decisión y del derecho a la vida.”
Si una mujer sufre una agresión por parte de otra mujer- como en el caso relatado- en sentido estricto no estaríamos hablando de violencia de género y , por tanto, la denuncia y sanción del delito se hará por los órganos jurisdiccionales ordinarios. La ley mencionada contempla otras formas de delitos donde la parte agresora puede ser otra mujer, por ejemplo: en los casos de violencia institucional, trata de mujeres niñas y adolescentes, violencia obstétrica, esterilización forzada y violencia laboral.
DIPLOMADO DE GÉNERO – Inscripciones
El Instituto de Altos Estudios en Salud Arnoldo Gabaldón (IAES) el día 8 de junio se iniciará el diplomado: GÉNERO SALUD Y CONSTRUCCIÓN DE CIUDADANÍA .
En el enlace que se envía a continuación pueden entrar a la página donde esta toda la información necesaria:
http://www.iaes.edu.ve/index.php/cursos/area-nueva-ciudadania/495-diplomado-genero-salud-y-construccion-de-ciudadania
También pueden hacerlo a través de la página web del instituto: www.iaes.edu.ve
Nota. El diplomado se realizará en la Escuela de Nueva Ciudadanía. Av. Las Delicias sede de Corposalud los viernes .
Para información y denuncias llamar
(O8OO-MUJERES) 0800-6853737
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Casa de la Mujer Juana Ramírez “La Avanzadora” Maracay
(Fundada en 1985)
Programa de Atención a mujeres en situación de violencia
De lunes a viernes de 8 a 12 y de 1 a 5 p.m.
CEDIAR -Centro de Documentación e Información Aída Arroyo.
Horario de Servicio: lunes a jueves de 1,30 a 5 pm -Funciona en la misma sede.
Directorio: Órgano Divulgativo de la Casa de la Mujer Juana Ramírez “La Avanzadora” C/ López Aveledo Norte No. 11. Urb. Calicanto. Aptdo. de Correos 2028. Telefax. 0243- 2463796 Correo E: [email protected] . No. 795 Año XXIII 6 \ 6\ 2012
