Tras múltiples protestas sin soluciones, los trabajadores de las empresas Carbones del Guasare y Carbones de la Guajira amenazaron con radicalizar sus acciones, todo para conseguir el pago de pasivos.

Los empleados del sector indicaron que las compañías tienen pendientes la renovación de los contratos colectivos, así como el pago de beneficios como fideicomisos, antigüedad y cajas de ahorro.

Los empleados de las compañías mineras manifestaron ayer frente a la sede de la matriz Carbones del Zulia (Carbozulia), propiedad de la Corporación para el Desarrollo de la Región Zuliana (Corpozulia), para exigir respuesta sobre la cancelación del dinero que les corresponde.

«Vamos a radicalizar las protestas, porque estamos cansados. En los próximos 15 días vamos a irnos a Caracas, vamos a concentrarnos frente a la Asamblea Nacional o Miraflores». Así lo aseguró Félix Merchán, presidente del Sindicato de Trabajadores de Guasare (Sintracarmiquin).

Los empleados del sector indicaron que las compañías tienen pendientes la renovación de los contratos colectivos, así como el pago de beneficios como fideicomisos, antigüedad y cajas de ahorro.

Los mil 600 trabajadores de Guasare exigieron la cancelación de 42 millones de bolívares, mientras que los 450 de Guajira reclamaron otros 37 millones.

La promesa

El sindicalista recordó que el 22 de julio, el presidente Hugo Chávez, desde el Complejo Ana María Campos, anunció la aprobación de recursos por 35,2 millones de bolívares para el pago de pasivos, pero aún el personal desconoce el paradero del dinero.

«El Presidente reconoció una deuda laboral de 70 millones. Ya el 22 de julio dijo que aprobó una primera parte por 35 millones. Pero nosotros no sabemos ni cuando nos van a apagar ni cómo ni cuál será el plan para rescatar a las empresas».

«Hemos solicitado información de todos los directivos, desde el presidente de Corpozulia, Arévalo Méndez, hasta los presidentes de las compañías y directores laborales, pero nadie nos da respuesta».

Jhonny Guevara, trabajador de Guajira, advirtió que la demora afecta a los más de dos mil empleados de las minas de carbón, a sus familias y a toda la subregión Guajira.

«En los municipios Mara y Guajira la economía se mueve gracias a los salarios de los trabajadores de carbones, por eso las autoridades deben abocarse a resolver esta situación, deben hacer una revisión exhaustiva de las empresas y de Corpozulia en general». (Daniela García, La Verdad, 09.08.12)

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Trabajadores del carbón amenazan con radicalizar protestas

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