El discurso permanente del presidente Chávez y su equipo de gobierno de asumir el compromiso con lo social resulta no siempre coherente cuando se contrasta con la práctica y con algunas de sus políticas. Es el caso por ejemplo del proyecto de presupuesto 2013 presentado para su consideración a la Asamblea Nacional.
Un análisis detallado de la propuesta de presupuesto nos indica incoherencias como las siguientes:
Se asigna en términos reales mas presupuesto a los asuntos relacionados con en Ministerio de la Defensa que a la totalidad de las Misiones. Además, el incremento otorgado al Ministerio de la Defensa es mayor al total de dinero que recibirán para su gestión en 2013 los ministerios de alimentación, agricultura, vivienda, deporte, cultura, juventud, mujer, pueblos indígenas y Defensoría del Pueblo.
Es muy revelador la proporción del gasto destinado a los militares con el dinero para ser ejecutado en políticas sociales. Según la Ley de Presupuesto 2013 las Fuerzas Armadas estarán compuestas por 146.786 personas, mientras que según el Censo 2011 la población indígena del país está conformada por 725.128 personas, casi el triple. Sin embargo los militares recibirán para el año que viene 156 veces más dinero que el total destinado al Ministerio de Pueblos Indígenas.
Está bien que se destine a la seguridad social de los militares y sus familiares una suma importante de dinero, lo que no es justo es que ese mismo compromiso social no se ejecute para otros sectores de la población con iguales o más necesidades.
Cuando se revisa más en detalle el presupuesto del Ministerio de Defensa aparecen más datos significativos. Para el 2013 la compra de equipos militares será por el orden de 16.087.081.911 Bs, una cifra mayor que la sumatoria total de lo que percibirán vivienda, alimentación, tierras, deportes, jóvenes, mujer e indígenas en conjunto. Las milicias recibirán 18.681.004 Bs, mientras que únicamente la unidad de “contrainteligencia militar” recibirá en el 2013 la mitad del total destinado a Ministerio Indígena, es decir 110.089.073 Bs. Es decir, más armas, menos campos deportivos. Más tanques de guerra menos distribución de alimentos.
En términos reales comparado con 2012 se asigna menos dinero para vacunas, para la atención de las personas con discapacidad, para dotar de insumos a la red de clínicas populares. La excepción: se destinará más dinero a la red hospitalaria del país.
Resulta realmente preocupante que siendo el problema de la inseguridad la situación social que más preocupa a la mayoría de nuestra población y afecta principalmente a los más pobres, se reduzca el presupuesto destinado a la seguridad. Ello pone en duda se alcancen las metas a mediano plazo de la Misión a Toda Vida y que tal vez se continúe extendiendo la violencia y el luto llegue a miles de hogares.
Queda a los parlamentarios y parlamentarias la responsabilidad de imponer cambios en el presupuesto 2013 con la finalidad sea más beneficioso para nuestra población.
