Marino AlvaradoEn momentos de luto nacional por el fallecimiento del presidente Chávez un sector político del partido de gobierno ha pretendido imponer una especie de inquisición que impide cualquier crítica al ex-presidente.

La gestión de gobierno en 14 años tuvo aspectos positivos muchos de los cuales hay que consolidar, pero también aspectos negativos que deben evaluarse en su dimensión para que no se repitan y superarlos.

Recordemos que en el 2006 el gobierno reconoció los altos niveles de arbitrariedad con los cuales actuaban los cuerpos policiales y por ello decidió adelantar el proceso de reforma policial

Con Chávez la pobreza bajó de 43,9% que estaba en el segundo semestre de 1998 a 26,7 en segundo semestre de 2011 que es la última cifra oficial suministrada por el Instituto Nacional de Estadísticas.

Pero, el asunto es más que una estadística. Su hábil discurso tuvo siempre como centro reivindicar a los más pobres y animarlos a conocer sus derechos. Muchos de ellos han desfilado ante su féretro rindiéndole homenaje como el maestro que les enseñó y despertó sus conciencias.

En el campo educativo hay aspectos donde se produjo un avance significativo. La matrícula en la educación inicial tuvo un índice de crecimiento de  103% y la universitaria de 243%. Aunque en primaria y media los avances fueron muchos menores en general en el campo educativo se redujo la exclusión escolar.

Se redujo la mortalidad infantil, aumentó la esperanza de vida al nacer a 74,3 años y aumentó en 126% el número de pensionados con respeto a la población pensionable, aunque todavía queda excluido un 40%.

Junto a los aspectos positivos, también se produjeron resultados negativos.

La inseguridad es uno de ellos. De 1999 a 2012 hubo en Venezuela un total de 149.920 homicidios, a un promedio anual de 10.708 homicidios. El presidente encargado Nicolás Maduro al entregar la Memoria y Cuenta a la Asamblea Nacional en nombre del presidente Chávez reconoció que en 2012 hubo 16.000 homicidios.

El incremento de la crisis carcelaria. De 1999 a 2011 fueron asesinados en las cárceles venezolanas un total de 5.066 presos a un promedio de 389 por año.

A ello se suma las ejecuciones realizadas por las policías del país.

Recordemos que en el 2006 el gobierno reconoció los altos niveles de arbitrariedad con los cuales actuaban los cuerpos policiales y por ello decidió adelantar el proceso de reforma policial.

De 1999 a 2011 los cuerpos policiales le quitaron la vida de manera arbitraria generalmente bajo la modalidad de ejecuciones a un total de 2437 personas. Pero esta cifra recopilada por Provea es muy inferior a los datos suministrados por el Ministerio Público que ha indicado que hasta el 2007 las violaciones al derecho a la vida eran de 7243 perpetradas tanto por funcionarios policiales como militares.

Igualmente la reiterada práctica de la tortura por parte de  organismos policiales como el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas o por la Fuerza Armada.

El pasado martes 12 de marzo Sabinito hijo del Cacique Sabino Romero recientemente asesinado denunció, por ejemplo, las torturas que le practicó el Ejército hace 12 días.

Con Chávez no todo fue bueno, pero tampoco malo.

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