Organismos defensores de los derechos humanos de Perú manifestaron hoy su preocupación por la posibilidad de que la próxima Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) determine el «debilitamiento» de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El Instituto de Defensa Legal (IDL) y la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos señalaron, en un comunicado, que la última sesión del Consejo Permanente de la OEA terminó sin acuerdos sobre la condición de las relatorías y la financiación de los Estados.
Los organismos añadieron que también «llaman la atención los proyectos de resolución emitidos por el Consejo Permanente de la OEA» que plantean enmiendas a la Convención Americana sobre Derechos Humanos (CADH) y buscaban «hacer vinculante lo acordado en una reunión informal de algunos Estados que han ratificado la Convención Americana (CADH)».
En esa reunión, celebrada en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil, se propuso un cambio de sede de la comisión, lo que abrió «la posibilidad de cambiar el Estatuto de la CIDH», aseguró el comunicado.
«Rechazamos todo intento de imponer una reforma vía modificación del Estatuto de la CIDH», añadieron el IDL y la Coordinadora de Derechos Humanos, que recordaron que el artículo 39 de la CADH «establece claramente que para realizar una reforma del Estatuto tiene que existir una propuesta de la propia Comisión».
«En su momento (1979), los Estados decidieron establecer esta fórmula para garantizar la independencia de esta instancia internacional frente a los Estados. Por ello, exhortamos a los Estados miembros de la OEA a cumplir con lo establecido en la Convención», remarcaron.
Los organismos peruanos también exhortaron a los Estados miembros de la OEA que aún no han ratificado la CADH que inicien un proceso interno de consultas y consideraron que «nada justifica que después de más de 30 años de vigencia de la CADH, aún existan diferentes compromisos jurídicos de los Estados en relación al sistema interamericano».
Mostraron, además, su apoyo a la reforma reglamentaria aprobada por la CIDH, a partir de la propuesta hecha por los Estados miembros en junio de 2012 en la asamblea general celebrada en la ciudad boliviana de Cochabamba.
Los organismos peruanos respaldaron, asimismo, la labor de la Relatoría Especial de Libertad de Expresión (RELE) y rechazaron «todo intento, directo o indirecto, de debilitarla».
Manifestaron, finalmente, su confianza en que el Gobierno de Perú «plasmará su apoyo al sistema interamericano no sólo dando cumplimiento a las decisiones de la Comisión y la Corte, sino incrementando su aporte financiero a dichos organismos».
El Gobierno de Perú ratificó esta semana «su compromiso con el fortalecimiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos» y su apoyo a la conformación de una misión de cancilleres para buscar la adhesión a la CADH tanto de los países que no son parte de ella como de los que la han denunciado.
La Cancillería peruana también rechazó, en un comunicado, algunas informaciones periodísticas que aseguraban que había criticado, en sintonía con Ecuador, la labor de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión.
El Gobierno de Perú aseguró que esa es la motivación con la que concurrirán sus representantes a la reunión de cancilleres que se celebrará el próximo viernes en la ciudad de Washington. (Noticias Terra, 21.03.13)