El director del Hospital Central Universitario Antonio María Pineda (Hcamp), Dr. Ruy Medina, confirmó los resultados del informe presentado por los diputados del Consejo Legislativo Estadal, donde la Unidad de Cirugía Cardiovascular no funciona.
Durante la plenaria de este jueves 19 de septiembre, la comisión que investigó la situación de la Unidad de Cirugía Cardiovascular del Hcamp, donde los diputados de la comisión especial presentaron un informe y en el cual denuncian que el servicio de la Unidad de Cirugía Cardiovascular no ha realizado durante el año 2013 ninguna operación de corazón.
Pero además Ruy Pineda destacó que desde la renuncia en el año 2011 del único cirujano cardiovascular que laboraba en ese servicio, afectó gravemente las funciones del mismo.
A ello se suma la falta de aire acondicionado lo cual dificulta la realización de las intervenciones, el déficit de médicos especialistas y enfermeras capacitadas para el área, así como instrumentos para desarrollar las intervenciones.
«Son múltiples razones por las cuales el servicio de cirugía cardiovascular no se encuentra funcionando, muchas de ella escapan de nuestras manos. Los aires acondicionados se dañaron, el CLEL no había aprobado los recursos hasta la primera semana de agosto y cuando al fin los dieron no se conseguía el equipo con las toneladas necesarias para el área”.
Además, destacó que los médicos intensivistas necesarios para el servicio se han retirado del hospital, debido a los bajos sueldos, mientras que las enfermeras especialistas son escasas.
También los dos anestesiólogos cardiovasculares decidieron irse a los centros de salud privados, dejando vacante el puesto en el Hcamp y hasta la fecha no se ha conseguido que nuevos especialistas ingresen al área.
«El servicio funciona a medias, con un cirujano vascular periférico, por ello no se pueden colocar marcapasos. A esto se le suma la falta de equipos y la necesidad de cuatro médicos especialistas en el área para garantizar las intervenciones cardiotoráxicas”.
Las consecuencias de estas faltas arroja un aproximado de 800 personas en una lista de espera para realizarse este tipo de intervención quirúrgica.
«Pedimos al CLEL que en vez de estar peleando por diferencias políticas agilicen las solicitudes de recursos para el sector salud, para así poder disponer de ellos y dar soluciones. Los perjudicados con los retardos y retenciones no le hacen daño ni al director del hospital ni al Gobernador, sino a la gente”.