Según informaciones extraoficiales siete funcionarios de la Guardia del Pueblo estarían involucrados en la golpiza en contra de José Alejandro Márquez la noche del miércoles 19 durante las protestas realizadas en la esquina de Candilito en la parroquia Candelaria.
Funcionarios del Cuerpo de investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) tienen en su poder material audiovisual que captó la agresión de los efectivos castrenses que condujo a la identificación de los responsables.
La víctima sufrió fractura de cráneo y sufrió un edema cerebral que le produjo una hemorragia severa. Esto derivó en muerte cerebral que lo condujo a su fallecimiento la tarde de este domingo en el Centro Médico de Caracas, según el informe médico preliminar.
Su cuerpo fue ingresado a la medicatura forense de Bello Monte a las 7:30 de la noche del domingo. En la mañana dos fiscales del Ministerio Público y una comisión del eje de Homicidios de la policía científica, supervisaron la autopsia practicada al cuerpo.
Una vecina de la víctima, quien prefirió mantenerse en el anonimato, relató que su hijo había bajado con Márquez a las manifestaciones.
«Ellos eran amigos, al punto que se decían primos. Yo estaba atendiendo a mi madre que se encuentra quebrantada de salud en San Bernardino y antes de las 9:00 p.m. recibí una llamada telefónica y me notificaron que al primo de mi hijo le habían dado un tiro. Había mucha confusión, pues por las redes sociales decían que fue trasladado a la Clínica La Arboleda y a otros centros de salud. De inmediato, entré en pánico, no sabía qué hacer. Mi muchacho de apenas 20 años, no se reportaba para informarme de lo ocurrido. Mi esposo salió a buscarlo por varias zonas».
Esa fue una de las madrugadas más terribles que le tocó vivir, pues desconocía el paradero de su hijo hasta que a las 6:00 a.m. apareció en la casa y le dijo que se quedara tranquila. Desde ese día, ella tiene lágrimas represadas y cuando se enteró que la víctima de la golpiza era José Alejandro, el vecino del décimo segundo piso del edificio Iberia en Candelaria y considerado el hermano mayor de su muchacho, está en una especie de shock.
«No puedo con el sentimiento de culpa que me invade. Insité (sic) a mi hijo a protestar. Tengo una mezcla de rabia e impotencia. Desde ese día mi hijo no es el mismo, aunque aparentemente luce tranquilo y se ve bien, está sumido en la tristeza y le cuesta creer lo ocurrido», dijo la mujer.
Comentó que José Alejandro Márquez era ingeniero en sistemas, con un master, vinculado a su carrera. En los próximos días se marchaba del país porque aceptó una propuesta de trabajo en Alemania. Iba a estudiar el idioma de ese país. Tenía dos hijos. «Era un hombre emprendedor, querendón y luchador, que quería su país y por eso le preocupaba la crisis y apostaba a la mediación de los conflictos».
Con la muerte de Márquez, suman once los caídos durante las manifestaciones.
Alfredo Romero, director del Foro Penal Venezolano, manifestó que de comprobarse que Márquez fue retenido por los cuerpos de seguridad y golpeado durante su detención, se convierte en el primer venezolano asesinado por tortura en el país, producto de las protestas. Las denuncias por torturas en estas manifestaciones ascienden a 19. (El Universal, 25.02.14)