Quien suscribe, Ismardo Bonalde, es Doctor en Física graduado en la Universidad de Harvard, con postdoctorado en la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign, Chicago, y actualmente Investigador Asociado Titular y jefe del Laboratorio de Temperaturas Bajas del Centro de Física del IVIC, quiero denunciar ante la opinión pública lo que mis asesores legales definen como un “acoso laboral” por parte de las autoridades del IVIC, en las instancias de la jefatura del Centro de Física, la Dirección y el Consejo Directivo.
Este acoso laboral se evidencia en tres acciones específicas realizadas por dichas autoridades que se han venido ejecutando desde abril del año pasado.
1) Se han negado sin explicación alguna a procesar por los canales regulares establecidos en la Ley del IVIC y su Reglamento tres (3) solicitudes de ascenso a Investigador Titular, máxima categoría del escalafón de rangos del IVIC, que he realizado desde julio del año pasado. Valga decir que cumplo ampliamente con los requisitos establecidos en la Ley y su Reglamento para hacer esta solicitud.
El director y el Consejo Directivo, que es el último ente de los canales regulares en revisar la solicitud de ascenso, han violentado las reglamentaciones legales y toda una tradición histórica en la institución al convertirse por primera vez el Consejo Directivo en el primer y, por ser la máxima autoridad, el único canal en revisar mis solicitudes. Esto crea un peligrosísimo antecedente de autoritarismo y arbitrariedad en relación a los ascensos de los investigadores, hasta ahora basados exclusivamente en méritos académicos y científicos.
2) La semana pasada recibí copia oficial de una correspondencia del director donde le comunica al Dr. Pedro Silva que el Consejo Directivo decidió, de manera inconsulta y autoritaria, transferir más del 66% de los equipos y del personal técnico del laboratorio bajo mi cargo a una nueva unidad de la cual él (Dr. Silva) será el jefe, cercenando con ello toda posibilidad de que yo pueda seguir realizando mis labores de investigación científica en el instituto.
Ignoro por completo las razones, evidentemente no técnicas, que tienen el director y el Consejo Directivo del IVIC para despojarme de los equipos del laboratorio que está bajo mi responsabilidad.
Ciertamente la Ley del IVIC, en su Art. 10, y su Reglamento, en los Artículos 2, 3 y 4, da al director y al Consejo Directivo la potestad de crear, remover o modificar laboratorios o sus dependencias. Pero ello debería hacerse en el marco de una planificación académica y de acuerdo a las afinidades de los laboratorios existentes, como establece el Art. 3 del Reglamento a la Ley.
Sería impensable que de existir (no existe) una planificación académica ella estipulara el cierre o reducción a ninguna actividad de un laboratorio como el de Temperaturas Bajas, que tiene una sólida actividad científica y académica reconocida nacional e internacionalmente y que ha sido y es de inquebrantable apoyo a todo el IVIC y a toda la comunidad científica y técnica del país relacionada a temperaturas bajas y criogenia.
La división discrecional de los equipos y del personal técnico traería como consecuencia inmediata, muy posiblemente con carácter irreversible, la paralización total de cualquier actividad científica en el área de temperaturas muy bajas (cerca del cero absoluto de temperatura -273.16 °C) en el laboratorio.
3) Dos solicitudes de posibles sanciones en mi contra ante la Consultoría Jurídica del instituto por procedimientos clara y demostrablemente no realizados por mí y estando ellos en pleno conocimiento de ello.
Altos de Pipe, 01 de marzo de 2010
Ismardo Bonalde
CI 8857100
Publicado en http://www.asovac.org
Sin Agua, sin energÍa Eléctrica y lo mas lamentable, con un IVIC intervenido, desprestigiando y distorcionando las investigaciones científicas del país. Que vainas con el socialismo del siglo XXI.