Los trabajadores de Sidor tienen días en protesta. Hasta este jueves era una manifestación silenciosa, a lo interno de la fábrica, por los salarios depreciados que al cabo de pocos meses los han dejado igual o por debajo del salario mínimo nacional.
Esta semana una asamblea en el portón III de Sidor dio algunas luces del malestar en las bases. Al menos tres corrientes sindicales participaron, como desde hace tiempo no se veía, en una asamblea en la que proponían la creación de un frente en defensa del salario.
En la asamblea participó Leonardo Azócar, del Frente Laboral Independiente, así como dirigentes del Movimiento Siderúrgico, César Soto, y demás corrientes pequeñas que califican los actuales salarios como “paupérrimos”.
En 2014 el Gobierno anunció la firma del contrato colectivo en Sidor. Dos años después nadie conoce el supuesto contrato, porque no ha sido impreso ni firmado por todo el comité ejecutivo del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y Sus Similares (Sutiss).
El llamado caló y este jueves decidieron trancar la autopista por espacio de dos horas para hacerle al Gobierno voltear la mirada a Sidor.
Participaron decenas de trabajadores, trancando la vía en ambos sentidos, la misma que comunica a Ciudad Guayana con el resto del país.
Los dirigentes reclaman el aumento de 30 y 20 por ciento que el Gobierno otorgó por decreto presidencial al salario mínimo, así como mejoras en la póliza de salud, la entrega de los juguetes pendientes de diciembre y el pago oportuno de prestaciones.
Los dirigentes indicaron que estas son las primeras protestas para llamar la atención acerca de la situación laboral de los trabajadores. A las 11:00 de la mañana el cierre de vías terminó con la promesa de retomarla, si el Gobierno no hace lo ajustes correspondientes.
