Giovanny Urbaneja, presidente de la Fundación Socialista de Integración del Sur (Fundisir), se concentró este lunes frente al centro comercial Malaver I, en la avenida Fernández Padilla de Guanipa, junto a tres padres de familia. El objetivo era hacer una toma pacífica “en rechazo a la crisis alimentaria que tiene a la mayoría de las personas bajando de peso”.
En primer lugar, repudió la posición del gobernador y alcaldes cuando califican de guarimberos a quienes manifiestan por necesidad. “Realizamos esta pequeña protesta, unidos contra el hambre, en función de que la Defensoría del Pueblo y el Sistema de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, juntamente con el Tribunal de Menores, interponga un recurso de amparo para garantizarle la comida a los niños ahora que salen de vacaciones”.
Criticó que existan tres modalidades de distribución de comida, una para ricos, una para la corrupción y otra para los pobres.
Carlos González, habitante del sector José María Vargas, comentó que tiene dos meses desempleado y desde ese tiempo, sus cinco hijos no van a clases porque no tiene para darles de comer.
“¿Cómo mando a los niños a la escuela si no tengo ni siquiera para comer? Hace un mes llevaron una bolsa que eso lo que dura son dos días”.
Los representantes de la defensoría acudieron al lugar y acordaron con Urbaneja entregar la solicitud ante el tribunal.
El Tiempo
