La Corporación Eléctrica Nacional está perdiendo sus mejores cuadros profesionales y técnicos como consecuencia de los bajos salarios, la eliminación de beneficios socioeconómicos y la persecución política interna, que ha generado la renuncia de 1.300 trabajadores en los últimos 30 días.
Reinaldo Díaz, directivo del Sindicato de Trabajadores Eléctricos de la Gran Caracas, Miranda y Vargas, informó que “en Corpoelec no hay motivación para que el personal se quede. Se han ido ingenieros, químicos, linieros y técnicos, entre otros, con más de 15 años de experiencia porque se cansaron del acoso laboral y las malas condiciones socio-económicas y de seguridad industrial”.
El sindicalista refirió que esos trabajadores han preferido emigrar al exterior y a otras empresas en Venezuela “a la búsqueda de mejores condiciones y un futuro para ellos y sus familias”.
La salida masiva de personal altamente calificado y experimentado de Corpoelec afecta la calidad del servicio a los usuarios, además no es fácil conseguir el personal de relevo requerido para atender un sector tan complejo como el eléctrico, añadió.
El dirigente obrero precisó que los 1.300 trabajadores que se fueron representan 3% de la nómina de 42.000 empleados de Corpoelec. Destacó que la posición de la empresa y el gobierno de darle largas a la firma del contrato colectivo 2016-2018 ha complicado más las cosas: hay molestia por el deterioro de la calidad de vida de los trabajadores y sus familias.
La discusión de la convención, que tiene cinco años vencida, entre Corpoelec y los sindicatos se reanudó en marzo pasado y en junio le entregaron al presidente Nicolás Maduro el estudio económico del contrato. Pero, sin consultar a la representación sindical, la estatal eléctrica encargó las negociaciones al vicepresidente Aristóbulo Istúriz.
Díaz indicó que representantes de la Vicepresidencia se han reunido con algunos dirigentes sindicales, sin embargo hasta la fecha no hay una respuesta satisfactoria para la entrada en vigencia de la contratación. “Mientras tanto el poder adquisitivo se sigue deteriorando”.
El sindicalista señaló que los trabajadores ubicados en 10 de los 12 niveles del tabulador de sueldos de Corpoelec quedaron devengando el salario mínimo de 22.576,73 bolívares mensuales, decretado por el Ejecutivo a partir del primero de septiembre. Significa, agregó, que 31.800 empleados con una alta preparación, experiencia y antigüedad percibirán el mismo salario de un recién ingresado.
Sobre la persecución laboral, Díaz denunció que Corpoelec despidió a 20 trabajadores porque firmaron para apoyar el referéndum revocatorio. A lo que se suma el acoso contra el personal y las expulsiones de dirigentes sindicales y trabajadores que participan desde el 7 de julio en las acciones de protesta, asambleas en los centros de labor y la toma de calles para reclamar la firma inmediata del contrato colectivo.
La Cifra
20 trabajadores murieron en accidentes en 2012-2016 por condiciones laborales inseguras alertan los sindicatos.
El Nacional