Con huelga de hambre exigen libertad de Williams Sanguino

Lilian Sanguino, hermana del detenido, junto con estudiantes de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV) del Táchira y diferentes colectivos sociales se encuentran frente a la sede administrativa de la Asamblea Nacional para exigir justicia en el caso de su hermano.

La hermana del detenido inició el 09.08.10 una huelga de hambre como medida de presión para lograr la liberación inmediata de su familiar.

La huelguista sentenció  “nosotros somos revolucionarios y estamos aquí solicitando la liberación de William Sanguino, un joven revolucionario, que se encuentra injustamente detenido, por un crimen que no cometió”.

Sanguino aseguró que su hermano estaba defendiendo la UBV de los ataques de estudiantes Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET) e identificados con la oposición.  En ese contexto de enfrentamiento entre grupos, el 08.12.09, murió Jesús Eduardo Ramírez Bello, de la UNET, y el presunto autor del homicidio es el estudiante de la bolivariana.

Pero, los manifestantes sostienen que el proceso, desde el principio, estuvo viciado, y no se ha respetado el derecho al debido proceso, entre otras violaciones a derechos consagrados en la Constitución.

La hermana del detenido asegura “allá el CICPC llegó torturó y criminalizó al movimiento estudiantil revolucionario  e inculpó a un camarada totalmente inocente, que es Williams Sanguino. En este momento nosotros estamos solicitando la liberación de Williams Sanguino de manera inmediata, ya que no existe ningún tipo de pruebas en contra de él”.

Sobre los vicios procesales, Levi Medina, estudiante de derecho de la UBV, asegura, que el impacto de bala que causa la muerte Jesús Eduardo Ramírez fue efectuado a “muy corta distancia, prácticamente a quema ropa” y no 300 mts como aparece en el informe.

Por otra parte, señala que el cuerpo del occiso presentó signos de tortura “en el informe aparece flagelaciones dentro de su cuerpo, moretones, fue golpeado” Otro de los puntos que llama la atención de los manifestantes es que “la perimetría y el informe que realiza el CICPC no se hace donde cae el occiso” si no en otro lugar.

“Nosotros no estamos pidiendo impunidad, estamos pidiendo justicia, que se haga justicia entorno a este caso” aseguró Lilian Sanguino.

Durante el primer día de la huelga, se suscitó un confuso hecho que involucró a efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana y terminó con la detención por algunas horas de Alí Valenzuela, integrante de la radio comunitaria Alí Primera.

Desde Provea solicitamos a la autoridades competentes el respeto al debido proceso del presunto implicado en el asesinato de Ramírez, además, que tanto la Fiscalía, como la Defensoría del Pueblo, investiguen las denuncias que realizaron los familiares del detenido sobre allanamiento ilegal de morada y torturas a Sangunio por parte de funcionarios del CICPC.

Prensa Provea, 10.08.10

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