El Vicerrectorado Administrativo de nuestra Universidad, a través de la Dirección de Presupuesto, constató que el presupuesto para el año entrante de la institución sea aún más deficitario que el actual, debido a que además de no contemplar el índice de inflación ni actualizar la unidad tributaria, obvia un sinnúmero de urgentes necesidades, por lo que en el Consejo Universitario extraordinario realizado el martes en la noche en las oficinas de la Dirección de Servicios de Información Administrativa, la mayoría de los integrantes del máximo órgano decisor lo aprobó bajo protesta.
La Dirección de Presupuesto, encargada de explicar detalladamente la situación financiera a los consejeros universitarios en la reunión extraordinaria del Consejo Universitario que se prolongó hasta las 10:00 de la noche del martes, explicó que, para satisfacer sus necesidades y no contraer deudas, la Universidad de Los Andes requiere para el 2011 de un presupuesto de 1 millardo, 852 millones, 580 mil 106 Bs.F, siendo sin embargo, la cuota presupuestaria asignada por el Ejecutivo Nacional de 898 millones 23 mil 342 Bs.F, lo que arroja una diferencia de 954 millones 556 mil 764 Bs.
Para simplificar la explicación, la Dirección del Vicerrectorado Administrativo hizo uso de los porcentajes, informando que, se recibirá un 48% de lo solicitado, quedando un déficit de 52%, lo que a duras penas alcanzaría para funcionar 6 meses del próximo año.
Continuó explicándose que, parte de lo asignado para el 2011 irá destinado a pagar el aumento salarial del 30% que antes no estaba incluido y que el Ministerio de Educación Universitaria, a través de la Oficina de Planificación y Presupuesto (Opsu), enviaba aparte la nómina de todo el personal docente, administrativo, técnico y obrero, el salario mínimo para quienes antes estaban remunerados por debajo de esa cantidad, el bono vacacional, el beneficio de alimentación o cesta ticket a 32,50 BsF, 8.5% para empleados y docentes, pago del fideicomiso y gastos de funcionamiento que incluye transporte, comedores, servicios públicos, entre otros.
Se considera que, con un ejemplito muy sencillo se pudiera entender mejor la situación, diciendo que: «es como si se hubiera entregado a alguien 400 BsF para hacer un mercado en el año 2007 y se pretenda que con esa misma cantidad esa persona compre el mismo mercado y además, incluya otros ítems, lo cual resultaría imposible».
Ante esta diferencia presupuestaria, la ULA va a solicitar a la Opsu que, vía insuficiencia, reconozca el déficit porque de lo contrario, nuestra máxima casa de estudios estará en peores condiciones que este año, no pudiendo cubrir los gastos mínimos en materia de salud, investigación y docencia.
Ya sabemos que Camiula está colapsada, que los comedores dejarían de funcionar en pocos días, que existe la necesidad de una estabilidad para el personal contratado, que el vestuario del personal obrero no satisface las mínimas necesidades para laborar, que a los vigilantes no se les ha cancelado el bono nocturno, que no existe una política de reposición de cargos, que las dependencias no tienen recursos para funcionar y que unido a ello, el sector universitario goza de un sueldo que raya en la miseria por un acto de simple injusticia. Se acaban de aprobar unos créditos adicionales, esperaremos noticias de a donde serán direccionados los recursos, porque si a ello vamos: «la política del aguante también tiene sus límites».
(Prensa ULA, Diario de Los Andes, 08.10.2010, http://diariodelosandes.com/content/view/133276/105888/)