La rutina de ir al colegio o de alimentar un bebe involucra a toda la familia Lanz lo quieran o no. Roberto, el papa duerme con su hijo de 12 años de edad en la parte superior de una litera, la parte de abajo esta reservada para sus esposa y si otro hijo de 3 años de edad. Al lado de su cama esta la cuna de su pequeño recién nacido.

Tres años y medio antes, esto no pasaba, los Lanz vivían en el Llanito. Decidieron comprar unos de los 125 apartamentos de las Residencias Los Pinos en Carrizal, para estar más cómodos. Vendieron su apartamento, se endeudaron, pero pagaron los 145.000 bolívares de la cuota inicial. Sin embargo, el cobre de un ajusto según el Índice de Precios al Consumidor postergó indefinidamente la entrega de la vivienda y los confinó a vivir en una habitación de la casa de la abuela paterna.

La construcción de las residencias se inició en 2007 y debía culminar 18 meses después, pero se retrasó. El retraso coincidió con la activación de la resolución 110 que prohibió el cobro de cuotas basadas en la IPC para la adquisición de viviendas. La constructora hizo un segundo contrato donde incrementaba el precio y donde los obligaba a renunciar de ejercer acciones civiles y penales.

Sajid López y su novia compraron un inmueble en la última etapa del Conjunto Residencial El Encantado, en Macaracuay, porque quieren casarse y formar una familia. Debía ser entregado este año, pero la inmobiliaria les informó que hay retrasos; el edificio de 11 pisos en el que esperan vivir apenas lleva 4 construidos. Algunas familias admiten haber cancelado 150.000 adicionales del costo del apartamento, pues desean recibir su casa, aunque el cobre del IPC sea ilegal.

Ilegalidad

La resolución 110 emitida por el extinto Ministerio de Obras Públicas y vivienda y publicada en la gaceta oficial 39.197 del 10 de junio de 2009, prohibió el cobro de cuotas basadas en el cálculo del Índice de Precios al Consumidor en los inmuebles construidos, por construir o en construcción. Antes de eso, los precios se ajustaban según el IPC fijado por el Banco Central de Venezuela. Pero a pesar de la prohibición el cobre de este prosiguió. (EN impreso; 10.10.2010)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *