El pasado 7 de julio de 2015, los ciudadanos Cenis Carrero, Jhon Aguilar, Jhonatan Mora y Alexis Vivas, fueron desaparecidos forzosamente presuntamente por funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (CONAS) de la GNB.
La señora Josefa Contreras, madre del detenido desaparecido Cenis Carrero, se acercó a la sede de Provea para solicitar apoyo frente a la desaparición forzosa de su hijo, presuntamente a manos de organismos de seguridad del Estado. «Lo único que sabemos fue que fue un organismo del Estado que se los llevó porque fue a las tres de la tarde donde todo el mundo vio».
Entre el mes de noviembre y diciembre de 2015 una persona atestiguó haber visto a los jóvenes vivos en la sede GAES- CONAS ubicado en la Hacienda Onia, cerca de El Vigía. «Los tenían en el área de la piscina ahogándolos y golpeándolos, pero quiero indicar que cuando pasaron los cuatro muchachos al calabozo, cuando fue la última vez que los vi…, vi a Michaell como sangrando por la comisura de la boca y la cara roja…» señaló el testigo quien también fue víctima de abuso de poder por parte de los guardias: «Me dieron patadas y dos culatazos por la espalda con el fusil…»
Josefa Contreras hizo denuncias ante la fiscalía del estado Mérida, pero a pesar de que han estado atentos a la situación no han podido dar cuenta del paradero de su hijo ni de los otros detenidos desaparecidos. De igual forma se ha dirigido a la sede del CONAS y ha recibido tratos displicentes por parte de los funcionarios, específicamente de un funcionario que Contreras reconoce como Capitán Beltrán. «Con él era que yo tenía comunicación, siempre le preguntábamos qué sabía, y él de manera déspota lo único que decía era que no sabía nada, que estaban en eso. Ya por último nos dijo que ya no podía hacer más nada, que era la Fiscalía 13 la que tenía que informarnos qué más íbamos a hacer».
Las madres de los detenidos desaparecidos exigen «justicia ya» para sus hijos.