Los trabajadores de Orinoco Iron continuaron este martes las asambleas en portones y comedor bajo la misma consigna: que la comisión de transición sea destituida por el Ministerio de Industrias Básicas y Minería (Mibam) y se dé espacio para que los técnicos de la briquetera asuman la dirección.
La vocería la asumieron trabajadores que participan en la comisión presidencial del Plan Guayana Socialista, quienes también respaldan la solicitud de destitución de los gerentes vinculados a finanzas, comercialización y compras.
William González, miembro de esa comisión, manifestó que el presidente de la junta transitoria, Luis Velásquez, y otros gerentes han cometido irregularidades que “perturban” a los empleados.
Incriminan a la comisión liderada por Velásquez de obstaculizar la conformación de las mesas de trabajo en el marco de la implementación del control obrero.
El Plan Guayana Socialista contempla mesas de trabajo presidenciales, y mesas técnicas en cada una de las empresas distribuidas por área. Reclaman que en Orinoco Iron éstas no han podido ser constituidas por sus implicaciones: acceso de los trabajadores a información “confidencial” del área de comercialización y finanzas.
“Se nos dijo que nosotros éramos trabajadores guarimberos, no lo somos, somos trabajadores de esta planta que queremos ponerla en pleno funcionamiento”.
Los empleados continuarán esperando que el ministro de Industrias Básicas y Minería (Mibam) acuda a las instalaciones de Orinoco Iron, para solventar el conflicto laboral.
“Queremos que seamos los trabajadores quienes decidamos sobre qué vamos a hacer con la planta y a quién vamos a colocar a la cabeza”, agregó González.
El reclamo laboral estalló en el 2010, pero ahora -en los primeros días del año- los trabajadores están decididos a sacar la comisión de transición.
Los empleados consideran que accediendo a las gerencias medulares puedan regularizar la venta de los productos e incrementar la productividad.
La briquetera, nacionalizada en mayo de 2009, opera en un 33 por ciento de su capacidad. Afronta un déficit en el suministro de mineral de hierro, lo cual le impide colocar otro tren en operaciones. También esperan inyección de capital para realizar inversiones en la planta, especialmente, en el área de salud y seguridad laboral. (CorreodelCaroní, 12.01.2011)