Milton Homero Sequera (18), estaba preso desde el miércoles por el delito de robo de vehículo, y extrañamente apareció muerto en un sector de la hacienda Machillanda de Ocumare, zona adyacente a la sede detectivesca, luego de haber sido llevado al lugar por un funcionario de la policía científica

El joven localizado muerto en la mañana del pasado sábado en la entrada de la hacienda Machillanda del sector El Rodeo de Ocumare del Tuy, estaba preso en los calabozos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de los Valles del Tuy y extrañamente apareció sin vida en este sector cercano a la sede judicial.

El ahora occiso fue identificado como Milton Homero Sequera de 18 años de edad, quien estaba recluido en la policía científica desde el pasado miércoles, luego de haber sido arrestado por efectivos de la Brigada contra Homicidios de la zona, al tripular un vehículo solicitado por el delito de robo, según expediente I-567-512 de fecha 06-10-2.010, el cual era llevado por el Cicpc de Caracas.

Se supo que en horas del mediodía del sábado, familiares de Sequera acudieron, como lo hacían desde le pasado miércoles, a la sede del Cicpc para llevarle comida cuando fueron informados que el muchacho no estaba en los calabozos. De inmediato la duda invadió a los allegados del reo, quienes exigieron una explicación del paradero del muchacho. Al final de la tarde, los consanguíneos de Sequera fueron conducidos hasta la morgue donde reposaba un cadáver que estaba sin identificar. Allí, se percataron que el jovencito que presentaba una cicatriz en el abdomen, era su allegado.

Es importante destacar que Sequera había sido imputado por la Fiscalía 16 del Ministerio Público en una audiencia de presentación el pasado viernes, luego que este acto judicial, que estaba previsto realizarse el jueves, había sido diferido. Durante la interpelación el tribunal dictó medida preventiva de la libertad enviando al detenido al Internado Judicial de Los Teques, mientras se continuaba con el proceso judicial. Los directivos del Cicpc gestionaban el cupo respectivo para concretar el envío de este reo a su penal de reclusión.

Los hechos

En la mañana del sábado, personal de supervisión del Cicpc se percató de que en los calabozos faltaba un reo, determinando posteriormente que se trataba de Sequera. De inmediato se activó la alarma y comenzó la búsqueda del reo en los diferentes cuerpos policiales de la zona, ya que las autoridades presumieron que, quizás por error, éste había sido enviado a las celdas de alguna municipal o recinto carcelario. No obstante, luego de haberse verificado la información se confirmó que Sequera había sido sacado de los calabozos de la antigua PTJ por un funcionario del Cicpc de nombre Maikol Caraballo, quien es agente de este cuerpo desde hace seis meses luego de haber laborado en la Policía Metropolitana de Caracas.

La fuente reveló que al parecer Caraballo, quien estaba de guardia de viernes para sábado, aprovechó que se quedó sólo en el servicio para sacar de las celdas a Sequera, entre las 4:00 a.m. y 5:00 a.m. Las investigaciones de los sabuesos de la Brigada Nacional contra Homicidios, apoyados por sus homólogos de Los Teques e Inspectoría General, tratan de determinar si Caraballo asesinó al preso o si por el contrario lo entregó a algún grupo de personas para que cometiera el asesinato.

Aunque se nos informó que estaba descartada la participación de otros efectivos en este suceso, ayer los expertos de técnica realizaban el barrido de varios carros particulares de algunos funcionarios, además que entrevistaban a otros más.

De Caraballo se supo que reside en el sector de Carapita en Caracas. El pasado mes de agosto fue transferido al Cicpc de Ocumare. Trabajó una semana y se fue de reposo, tras haber recibido un balazo en costado derecho, al ser atacado en las adyacencias de su casa. El agente retomó sus actividades el pasado lunes. Estaba asignado a la Brigada de Aprehensión y Búsqueda y posteriormente fue transferido, el día jueves, a la de Violencia.

¿Un crimen por encargo?

El motivo por el cual el funcionario Caraballo sacó a Sequera de los calabozos es el punto fundamental de las investigaciones en los actuales momentos. Los detectives no descartan que el funcionario haya recibido una fuerte suma de dinero para cometer tal acción. Además se conoció que el entorno de Sequera también es indagado. Vale la pena resaltar que en el día de ayer en el Cicpc reinaba un total hermetismo en torno a este caso. (La Voz, 11.10.10)

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