El Gobierno de Hugo Chávez lleva a cabo un plan para que las personas que cumplen penas de prisión se incorporen a la música sinfónica a través de orquestas en las penitenciarías, con el objetivo de enrolar a más de 1.500 reclusos, informaron este jueves fuentes oficiales.
El ministro de Interior y Justicia, Tareck El Aissami, destacó el «paso importante hacia la humanización del sistema penitenciario» que supone esta política, al inaugurar el sexto núcleo de la Orquesta Sinfónica Penitenciaria en la isla de Margarita, en el noreste, que forma parte del laureado Sistema Nacional de Orquestas.
El Aissami informó, en una intervención transmitida por Venezolana de Televisión, que este proyecto musical para presos tiene como meta lograr la formación de 1.550 internos a escala nacional para que integren la Orquesta Sinfónica Penitenciaria.
«Este núcleo que hoy inauguramos del Sistema de Orquesta Sinfónica Penitenciaria, que es el sexto a nivel nacional, está integrado por estos primeros 60 hombres, pero tiene como meta formar 250 internos de este internado judicial», dijo.
El ministro destacó la puesta en marcha de la «Red de Teatro Penitenciario» para lograr que los internos se sientan incluidos en la sociedad.
El recluso Antonio Luque, quien forma parte del núcleo musical, dijo que con este proyecto se demuestra que en los penales «también se puede aprender» e invitó a otros «compañeros» a sumarse al programa sinfónico.
El diputado opositor William Ojeda, integrante de la comisión parlamentaria de Régimen Penitenciario, denunció hace un mes que los presos en Venezuela afrontan terribles condiciones de reclusión.
Ojeda explicó que en el país hay 33 prisiones diseñadas para 14.000 internos, pero ocupadas actualmente por 44.000 personas.
Varias organizaciones no gubernamentales de Venezuela expondrán el próximo día 29 ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) la situación en este país sobre varios temas, entre ellos, el de las prisiones.
En febrero la CIDH urgió al Gobierno venezolano a tomar medidas inmediatas después de actos de violencia que acabaron con dos muertes y 54 heridos en una prisión. (El Carabobeño, 17.03.11)