Dos privados de libertad del Internado Judicial El Rodeo II heridos, al igual que un funcionario castrense, dejó una revuelta entre los mismos y funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, iniciada la tarde del pasado lunes y finalmente controlada por los efectivos militares, tras cerca de 12 horas de fuego cruzado, según se conoció ayer desde el penal guatireño, donde aún reinaba la tensión, al calor del pase y lista de internos que se llevó a cabo.
De acuerdo a las informaciones conocidas, a eso de las 5:00 de la tarde del día lunes 22 de noviembre los privados de libertad de la torre de reclusión iniciaron una protesta y desde el lugar y disparaban armas de diferentes calibres, lo que generó que se activará la alarma anunciando anormalidad y alerta por los hechos violentos que se registraban.
Piquetes de la Guardia Nacional y funcionarios del Ministerio del Interior y Justicia tomaron posiciones estratégicas hasta entrada la noche.
Se conoció por parte de algunos líderes, que en el lugar habían dos compañeros de celda heridos y que necesitaban ayuda, la cual se le prestó oportunamente en el CDI ubicado justo al lado de la cárcel, una vez se pudo accionar el ingreso al área de fuego cruzado.
También un funcionario de la GNB que estaba en el dispositivo activado fue alcanzado de un disparo, dijo la fuente consultada ayer.
Nerviosismo en la comunidad
Alarma general entre los habitantes del sector El Rodeo de Guatire que viven en los alrededores de este recinto carcelario, ocasionó este nuevo hecho de violencia, ya que muchos no pudieron “pegar sus ojos” durante las horas de la noche del lunes y la madrugada de ayer martes, debido al sonido y peligro de las balas disparadas por los presos desde el interior y los custodios ubicados en diferentes ángulos; y que algunas pegaban en las paredes de edificios, haciendo incluso que las personas tuvieran que lanzarse al piso para evitar que traspasaran e impactaran en sus cuerpos.
De nuevo estos vecinos hicieron un llamado a las autoridades penitenciarias a que trataran de evitar estos motines, cumpliéndoles a quienes reclaman algún derecho porque los residentes roedeños también sufren las consecuencias, advirtieron algunos vecinos que pidieron omitir sus nombres para evitar represalias.
A las afueras de la cárcel asimismo se escucharon reclamos de familiares desesperados que no sabían a ciencia cierta lo que estaba ocurriendo y sólo hubo cierta tranquilidad en horas de la mañana de ayer martes, cuando hicieron acto de presencia funcionarios del MIJ y fiscales del Ministerio Público, quienes realizaron la inspección respectiva, a fin de determinar las responsabilidades del caso y decomisar cualquier tipo de armamento que esté en manos de los reclusos.
Cese al fuego claman familiares
Un interno vía telefónica afirmó que los heridos fueron llevados al Centro de Diagnóstico Integral (CDI) de El Rodeo, por una puerta trasera del penal, eludiendo a los familiares de los reos que estuvieron desde el mismo momento en que se generaron los hechos buscando información sobre sus allegados.
Las causas del hecho no fueron precisadas por los internos ni por las autoridades penales.
Ese mismo preso señaló que los efectivos castrenses se mantuvieron escondidos y además en las afueras del penal un grupo de familiares exigieron el cese al fuego que culminó casi al medio día, acotando que se empleó gas lacrimógeno en el recinto y se habrían registrado presuntos maltratos a los reos. Sin embargo, unas 30 personas, familiares de internos, se acercaron a la cárcel y constataron la situación.
(Jairo Garzón Romero, Diario La Voz, 24.11.2010, http://www.diariolavoz.net/seccion.asp?pid=18&sid=431¬id=347356)