Las ciudades de Mérida, Tovar, El Vigia y Timotes se encuentran sacudidas esta semana por protestas que generaron saqueos y cierre de vías por la falta de alimentos.
El poblado de Timotes, ubicado en el municipio Alberto Adriani al sur de la entidad andina, se encuentra militarizada este jueves luego que una multitud saqueara el Pdval de la localidad, enardecida porque tenía un mes sin comprar alimentos regulados, explicó el concejal de Un Nuevo Tiempo Luis Salas.
La militarización también alcanza a varios sectores de la ciudad de Mérida, la capital de la entidad, donde hoy se practicaron allanamientos para capturar a los involucrados en los conatos de saqueo y saqueos a comercios, que estallaron el martes por la falta de comida en el comedor de la Universidad de Los Andes (ULA).
En Tovar, ubicado al oeste del estado, se realizaron el lunes trancas en las vías por la ausencia de alimentos de primera necesidad, aseguró el concejal en conversación conEl Estímulo.
En El Vigia, un camión cargado con 610 sacos de harina de trigo fue saqueado en horas de la madrugada en el sector Caño Seco, según información del periodista Euro Lobo.
-Detenidos en Timotes por saqueos a comercios y la alcaldía-
Salas explicó que en las calles de Timotes se encuentran tanquetas y cordones de seguridad de efectivos de la Guardia Nacional, luego del saqueo al Pdval en horas de la tarde del miércoles.
“Allí se llevaron de todo, bultos de comida, equipos electrónicos, informáticos y hasta sacos de cemento que se encontraban en el local”, apuntó.
Unas diez personas se encuentran detenidas por las autoridades, que se encuentran tras la búsqueda de la mercancía robada, aseguraron periodistas de la entidad.
La violencia en el poblado estalló luego que los manifestantes fueran a buscar al alcalde de Timotes, el oficialista José Concepción Rivera, quien había prometido la venta de los alimentos en el galón de la red estatal.
El alcalde no apareció y ante la desesperación por la falta de alimentos, estalló el saqueo. Funcionarios de la Guardia Nacional intentaron frenar a la multitud, pero fueron rebasados.
Los saqueos se extendieron hacia la sede de la policía local y la alcaldía, donde los manifestantes se llevaron cauchos, cajas de comida, baterías y material de oficina.
Ante la furia popular, la GNB lanzó bombas lacrimógenas y disparó balas de goma para disolver a las protestas. “Hoy, los militares están buscando en casas la comida y los productos saqueados por Timotes” , explicó el concejal.
El Estímulo
