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La crisis no mira colores políticos, menos académicos. La mañana de este viernes 8 de abril la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV) se quedó sin comedor y eso generó una protesta masiva de los empleados y obreros, quienes además de rechazar la medida, cuestionaron las condiciones de trabajo en esta casa de estudios.

La razón por la que fue cerrado el comedor es la misma que afecta a todos los venezolanos: no hay comida y tampoco tienen presupuesto. Una fuente de la institución comentó que los camiones de alimentos anteriormente llegaban dos veces a la semana, luego comenzaron a llegar una vez cada dos semanas, ahora simplemente no llegan.

El comedor en realidad dejó de trabajar desde el miércoles 6 de abril. “Nos dijeron que no estaban trabajando porque no había agua y porque había que ir a apoyar la marcha en contra de la Ley de Amnistía, pero al final para allá fueron 30 o 40 personas de la universidad”, contó la fuente consultada.

Desde hace más de dos semanas la carestía de alimentos ya se hacía sentir en la UBV, pues redujeron significativamente las porciones de comida y los tipos de menús al punto que a la 1:30 pm ya no había comida para nadie. “El que no comió temprano se quedó con hambre”, contó.

Este mismo comedor, ubicado en la sede principal en Los Chaguaramos, también es utilizado por los estudiantes.

Destrucción en “socialismo”

Las condiciones para trabajar y estudiar en la UBV distan de un ambiente académico óptimo, según denunció otra fuente que de igual forma pidió que no mencionaran su nombre. “Uno tiene que denunciar porque son demasiados años trabajando mal y viendo cómo estudian esos muchachos, pero al final prefiero que mi nombre no salga porque me ven en esto y sin piedad me botan”.

Por ejemplo, la flota de autobuses de “La Bolivariana”, para trasladar a sus estudiantes, está paralizada en 90% por falta de repuestos, por lo que la casa de estudios ha optado por pagar más de 100 mil bolívares a varios conductores de camionetas encavas, que funcionan como transporte estudiantil.

De los seis ascensores del antiguo edificio de Lagoven –Pdvsa- donde está la universidad en Caracas, solo funcionan tres.

Por otra parte, la prima profesional que le pagan a los profesores que se dedican a la investigación en la UBV apenas llega a 300 bolívares mensuales. El monto de esta prima fue divulgada “de boca en boca” entre los académicos, porque a los profesores no le entregan recibos de pagos mensuales desde hace cuatro años.

“Lo mejores profesores de la universidad están de lleno con eso”, confesó un estudiante “ubevista”.

Según el portal web https://investigacionubv.wordpress.com, la UBV tiene varias líneas de investigación en el campo de la Comunicación Social, entre ellas están: comunicación y comunidad alternativa; poder, democracia y medios de comunicación; comunicación y discurso político, entre otras.

Efecto Cocuyo

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