Padres y representantes se alzaron desde el pasado miércoles 20 de octubre para impedir que sus hijos continúen viendo clases en una institución que está ahogada en problemas.
Primero realizaron una protesta en las afueras del plantel para exigir a las autoridades educativas de la zona, la solución de las múltiples deficiencias que tiene el centro educativo. Este jueves 21 de octubre, a pesar de que no salieron a manifestar a la calle, se encontraban dentro de la institución para mantenerse vigilantes de que sus exigencias empiecen a ser tomadas en cuenta.
De acuerdo a Elis Carreño, uno de los principales reclamos que tienen es que las tuberías de aguas negras están obstruidas desde julio de este año. Contaron los padres que el agua sucia se desborda por una alcantarilla que está cerca de varios salones de clase; cada vez que esto sucede el mal olor afecta a los niños.
Debido al colapso de las cañerías, los baños se mantienen sucios pues además no hay agua, según narraron. Los grifos de los lavamanos están rotos y ninguno de los sanitarios tiene puertas. «La escuela está intacta desde hace 20 años, los mismos baños, las mismas pocetas, a esto no se le ha hecho ninguna modificación», declaró Ángel Calderón, representante.
También se quejaron de que las aulas son muy pequeñas para los 40 alumnos que ven clase en ellas. Las paredes están sucias, los vidrios de las ventanas rotos, los pupitres dañados. «A esta escuela la dejaron en el abandono, está deplorable, de la fachada para adentro parece una cárcel», reclamó Elen Barrios, cuyos dos nietos estudian en el plantel.
«Hoy encontramos a algunas maestras montadas en unos pupitres, echándole brillo a las paredes, buscando las maneras de conseguir pintura y no estamos de acuerdo con eso porque para eso los entes gubernamentales deben manejar un presupuesto, no es posible que las maestras tengan que sacar de su bolsillo para comprar pintura y tengan que ponerse a lavar las paredes a estas alturas», manifestó Calderón.
Por si fuera poco, la institución tampoco tiene luz (desde julio) y aunque tuviera, los salones no tienen ventiladores. En el año escolar pasado unos ladrones se llevaron un cable de alta tensión que dejó sin energía a todo el plantel. «Esto es un caos totalmente, aquí los representantes no recibimos ninguna respuesta satisfactoria», dijo el padre.
Más problemas
No basta con el deterioro de la infraestructura, pues denunciaron que el Programa de Alimentación Escolar (PAE) es deficiente. «Un pan con fiambre rayado y un vaso de té no es desayuno para un niño», resaltó una de las madres. Igualmente, señaló que la cantidad de comida que se sirve no es suficiente para todos los alumnos.
Otros representantes relataron que la cocina está en malas condiciones. No justifican que la institución esté tan deteriorada si a los padres se les cobró 40 bolívares por concepto de inscripción, cuando no deben hacerlo.
Los representantes afirmaron que después de la protesta que protagonizaron el pasado 20 de octubre, fue que se envió a un personal al plantel para hacer las primeras labores de desmalezamiento en la institución. Señalaron que la Escuela Básica Casacoima es la única institución educativa que está en Sierra Imataca, por lo que también han tenido dificultades para conseguir cupos para sus hijos. Manifestaron sentirse abandonados por la Alcaldía de Casacoima y por la Gobernación de Delta Amacuro, así como expresaron su descontento con el trabajo realizado por los directivos del colegio. (CorreodelCaroní; 22.10.2010)