Durante este fin de semana quedó nuevamente evidenciado las deficiencias que tiene el sistema de salud público en la entidad, donde la indolencia pareciera que no forma parte del personal que trabaja en la sala de emergencia del Hospital Universitario Manuel Núñez Tovar (Humnt).

Esta área se vio colapsada de pacientes al punto que el piso fue utilizado por muchos de ellos mientras esperaban ser atendidos por el personal de guardia.
Esta área se vio colapsada de pacientes al punto que el piso fue utilizado por muchos de ellos mientras esperaban ser atendidos por el personal de guardia.
La falta de camillas y sillas de ruedas es evidente, así como también los insumos y medicamentos. Con resignación muchos familiares aceptan esta situación, asegurando que en medio de las peleas políticas entre los gobernantes está un pueblo que padece las consecuencias. (Anne Córdova, El Oriental, 30.07.12)

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