Aunque Juan Bautista Díaz, director de la Unidad Oncológica Kléber Ramírez Rojas del Hospital Razetti, negó la semana pasada que existiesen retrasos o fallas en cualquiera de las máquinas del recinto, algunos pacientes declararon todo lo contrario.
Una dama, quien se identificó como Amalia Ríos, indicó que el pasado 25 de febrero se dañó la planta que suministra energía a una de las máquinas.
Agregó que el 11 de marzo la volvieron a citar para que se pudiese practicar la terapia, pero esa misma tarde se echo a perder la mesa donde acuestan a los enfermos de cáncer para recibir la radiación.
“El 13 de marzo regresamos y el sábado 16 la falla eléctrica volvió a aparecer. Nos dijeron que teníamos que esperar al ingeniero nuclear porque es el único en el país especialista en el tema”.
Sostuvo que desde entonces enviaron a los pacientes a sus casas pero que la necesidad de aplicarse el tratamiento la obligó a asistir a otro centro de salud.
Fallas
Eduardo Martínez, presidente del Instituto Anzoatiguense de la Salud (Saludanz) reconoció que una de las salas de radioterapia está dañada y que desde hace días están buscando una pieza que hace falta para arreglarla.
No precisó cuántos pacientes se dejan de atender por esta falla. Sin embargo, mencionó que en el oncológico se reciben entre 70 y 100 personas por mes.
Recordó que esta es una de las tres unidades oncológicas gratuitas que funcionan en el país. “Algunos centros de salud cuentan con el servicio, pero es demasiado costoso”.
Detalló que en el Luis Razetti trabajan 11 especialistas, entre ellos oncólogos médicos, cirujanos oncólogos, radioterapeutas, entre otros.
El funcionario no especificó si esa cantidad de galenos es suficiente para cubrir la demanda de pacientes.(Paúl Rivas González, El Tiempo, 25-03.13)
