La rutina diaria de los médicos residentes de la emergencia del Hospital Uyapar no es sencilla, pues cumplen sus labores en medio de muchas deficiencias que dificultan poder ofrecer una atención completa a los pacientes.
“Hay que tener claro que este es un hospital de referencia en Ciudad Guayana, pero ahorita no cuenta con los laboratorios mínimos necesarios, solamente se está haciendo la hematología, por ejemplo, los pacientes diabéticos no pueden ser monitoreados”, explicó la doctora Karin Puentes.
Indicó que debido a este problema los enfermos han tenido que asumir los costos de los exámenes que no pueden hacerse en el laboratorio del hospital, pues deben acudir a otros centros asistenciales. “Si no los hacen aquí, uno tiene que buscar la manera de hacerlos donde se pueda”, dijo la madre de una paciente. “Lo que quiero que te metas en la cabeza es que aquí no dan dotación, yo he tenido que mandar a hacer exámenes por fuera en clínicas privadas”, comentó otro hospitalizado, quien tampoco quiso identificarse.
Faltan insumos
Los familiares se han visto en la necesidad de comprar ciertas medicinas que no están disponibles en el recinto médico, como el caso de las nebulizaciones. Los médicos deben batallar con la escasez de insumos básicos como guantes, gasas y suturas, materiales que se agotan constantemente.
“La semana pasada no había Betadine que es lo básico con lo que nosotros hacemos las limpiezas y curas de los pacientes con heridas”, señaló Puentes. Informó que varios de los monitores de signos vitales que tiene cada cubículo de la emergencia no funcionan. “Sólo hay un monitor ambulante que funciona y se utiliza para los pacientes graves”.
El monitor de la computadora para el uso de los doctores está dañado y todos los informes tienen que ser pasados a mano, lo que acumula y atrasa la labor del personal. “Las condiciones en las que trabajamos no son las mejores, tenemos que trabajar con las uñas”.
Gestiones en curso
La directora del hospital, Yanitza Rodríguez, informó que el equipo de química sanguínea no es propiedad del centro médico, sino que fue dado en condición de comodato. Explicó que están haciendo las diligencias para sustituir el aparato por uno nuevo, en vista de que en el mercado no se consiguen las tarjetas del equipo, las cuales se deterioraron luego de un “desbalance de luz”.
Con respecto a la dotación de insumos aclaró, “en emergencia se han comprado insumos, realmente ahorita tenemos un problema y es que se ha multiplicado la asistencia de pacientes. Estamos ajustando los consumos porque se nos duplicó el consumo mensual. Los insumos se están comprando y se están triplicando”.
Dijo que los monitores de signos vitales han presentado desperfectos por el mal manejo que ha dado el personal y de los familiares que maniobran los aparatos. Igualmente, indicó que hay productos que no se consiguen fácilmente para su compra, como es el caso de ciertos reactivos que son usados en el banco de sangre. Añadió que se solicitaron las revisiones técnicas para graduar los equipos de rayos X, los cuales se alteran con los bajones eléctricos que se han producido. “Todas las necesidades estamos tratando de corregirlas”. (CorreodelCaroní; 28.10.2010)