Pacientes del hospital Magallanes de Catia, alertan sobre la situación de inseguridad que se vive específicamente en el área de Obstetricia en el piso 3.

Además señalan que en este servicio hay varias carencias, entre ellas la iluminación, señalando que es prácticamente nula, y que tampoco hay puertas «ahí cualquiera puede entrar y ya han habido intentos de robos a los recién nacidos».

Ivette Linares, paciente del hospital, comenta que  la noche del pasado 3 de febrero del presente año, alrededor de la una de la mañana, presenciaron a una persona asomado en las ventanas de las habitaciones de este piso. Unos minutos después de esto, Linares junto a su compañera de cuarto se encontraban descansado, pero vieron a un señor dentro del cuarto «escondido diciendo que estaba esperando que el personal de seguridad se retirará para poder salir».

Además señalan que en este servicio hay varias carencias, entre ellas la iluminación, señalando que es prácticamente nula, y que tampoco hay puertas «ahí cualquiera puede entrar y ya han habido intentos de robos a los recién nacidos». A pesar de que el hospital cuenta con la presencia de la Guardia Nacional, indican que no hacen mucho, pues realizan una ronda por el hospital cada dos o tres horas.

Igualmente la señora Elisa Linares indica que hubo un intento de llevarse a su nieto, «la enfermera buscó a la policía, pero ellos dijeron que estaban ahí para resguardar a los invasores de la zona». Aunque les informaron que levantarían un reporte para dejar registrada la situación y entrevistar a las pacientes, Linares dice que esto nunca se llevó a cabo y que no existe un registro en el hospital sobre lo sucedido.

Las pacientes decidieron realizar una carta donde explican la situación, la cual fue entregada al departamento de enfermería y el jefe de vigilancia interna. También querían llevarle el escrito al director del hospital, pero las enfermeras le informaron a Linares que desde hace tiempo no cuentan con esta autoridad. (Prensa Provea, 15.02.13)

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