Una chispa proveniente de cauchos incendiados de una protesta que se desarrollaba en horas de la mañana del 27.04.10 frente a la Estación de Rebombeo 5 de Hidrolara, en la avenida Florencio Jiménez, a la altura del kilómetro 11, por habitantes de la zona que clamaban por agua, terminó en un incendio de grandes dimensiones que consumió por completo tuberías de polietileno y fibra de vidrio de acueductos de 42 y 72 pulgadas respectivamente, así como un considerable lote de manto asfáltico que se encontraba en ese lugar.

El fuego inició como a la 1:15 de la tarde y se prolongó hasta pasadas las 8:30 de la noche, controlado en su totalidad por unos cuarenta funcionarios del Cuerpo de Bomberos tanto de Iribarren como de Jiménez, quienes debieron luchar no solamente contra las llamas, sino para buscar la forma de apagar la candela debido al poco equipo del cual disponían y a la falta de agua para llevar a cabo la riesgosa labor.

Los manifestantes le comunicaron a los bomberos que les permitían el paso si hablaban con funcionarios de la Policía de Lara para que liberaran a dos compañeros detenidos durante la protesta. (Richard Lameda, El Impulso, 28.04.10)

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