En el pasado quedó el nivel frenético de trabajo de buena parte de las obras del Gobierno, tras el paso de las elecciones presidenciales, según se pudo constatar en un recorrido realizado por El Universal.
El ritmo de construcción bajó notablemente en el complejo de más de mil viviendas que se erige en el puente Los Leones, en la urbanización La Paz.
Vecinos de la zona señalaron que durante las semanas previas a las elecciones gran cantidad de obreros trabajaban hasta altas horas de la noche, panorama que cambió en los últimos días. «Ahora trabajan sólo en el día, ya no prenden los faros que alumbraban para mover las maquinarias en las noches», apuntó Esperanza Rodríguez, habitante de la zona.
En algunas obras han optado por disminuir su plantilla. En el edificio de la Misión Vivienda ubicado en la calle Ávila de San Bernardino, el 50% de los trabajadores fueron despedidos en la última semana y sólo quedan trabajando cien en la jornada diurna, según informaron varios obreros.
El caso se repite en el edificio que se construye en lo que era Parque Vargas, en la avenida Bolívar, donde laboran actualmente unas 320 personas, treinta menos que en las últimas dos semanas.
Construir durante los fines de semana y feriados también quedó atrás, durante el puente del 12 de Octubre las obras estuvieron paralizadas en la mayor parte de la ciudad.
El tradicional «jueves de vivienda» que ha marcado la gestión del Gobierno desde hace varios meses no fue realizado la semana pasada.
Al respecto, Celia Herrera, directora de la Escuela de Ingeniería Civil de la UCV, señaló en una entrega anterior que las obras eran ejecutadas a toda máquina con el propósito de «mantener cercano el sueño de obtener una vivienda» ante la proximidad de las elecciones.
Para Aquiles Martini, presidente de la Cámara Inmobiliaria, la promesa del presidente Chávez de ofrecer en un futuro inmediato solución al déficit de más de tres millones de viviendas en el país no es viable. «La Misión Vivienda tiene un matiz político. Para dar respuesta a la crisis habría que construir varias ciudades como Caracas en tres años, proyecto que no es posible en corto plazo y para esto se debe incorporar al sector privado también».
Consideró que «dentro de cinco años volveremos a escuchar las mismas promesas».
El presidente Chávez dijo que asumió como personal el déficit habitacional. «Decidí agarrar las riendas del problema», destacó durante una inspección al desarrollo Ciudad Tiuna. Añadió que se están edificando 400 mil apartamentos «y en los próximos tres años se harán 3 millones más». (Dalyla Dennery, El Universal, 16.10.12)