Los vecinos del Conjunto Residencial Garzas y Gavilanes de la Urbanización El Marqués de Guatire, se mantienen en pie de lucha por lo que consideraron un atropello por parte del subgerente del Instituto Nacional de la Vivienda (Inavi), Wilfredo Hernández, quien ordenó el pasado viernes soldar las puertas de las residencias que, aunque adjudicadas por el organismo, presumió desocupadas.
El hecho, que para algunos vecinos no sólo es un atropello sino también una flagrante violación a los Derechos Humanos y por consiguiente a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, anunciaron que se organizarán para defenderse de las acciones emprendidas por el subgerente, pero también para querellarse en su contra en caso de que así lo requiera la situación, así como elevar la queja por ante el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y la Comisión de Vivienda y Hábitat de la Asamblea Nacional.
Como es del conocimiento público, un total de cuarenta apartamentos fueron sellados con soldadura en sus puertas por parte de funcionarios del Inavi que presumieron que se encontraban desocupados. La medida, que sorprendió tanto a los afectados como a todos los habitantes de la Urbanización El Marqués, fue levantada el mismo viernes ante la presión de los habitantes de los inmuebles que regresaban de sus trabajos o de realizar actividades propias de su vida.
Cabe destacar que hasta el presente no se conoce ninguna actuación por parte de organismos como el Ministerio Público ni la Defensoría del Pueblo en resguardo de las cuarenta familias afectadas; sólo por parte de efectivos de Polimiranda y Polizamora, que el viernes se presentaron en el lugar de los hechos pero para evitar desórdenes, no para resguardar la propiedad.
(Diario La Voz, 22.11.2010, http://www.diariolavoz.net/seccion.asp?pid=18&sid=424¬id=347205)
