Maria Eugenia Gil Beroes

El jueves 8, ingenieros de Carabobo vinieron a Caracas a fin de volver a explicar y compartir algunos de los problemas que están padeciendo. No pueden rendirse ante los oídos sordos de ciudadanos y funcionarios, porque entre otras cosas el agua contaminada está afectando a 3.000.000 de habitantes del centro del país. La salud humana y ambiental está en riesgo. Podrían perder su salud, su vida y sus viviendas.

16 AÑOS PERDIDOS En su exposición, el Ing. Gustavo Rivas Castillo señaló que los cálculos para conocer el índice de crecimiento fueron realizados en 1995. Para esa época le tocó trabajar en un grupo de empresas designadas por el Ministerio del Ambiente para estudiar las alternativas viables para detener el crecimiento del lago y sanear el agua que se vierte en él. Las empresas cumplieron con el encargo y el Ministerio obtuvo la información técnica.

MOVIMIENTO POR LA CALIDAD DEL AGUA El Ing. Manuel Pérez Rodríguez volvió a explicar la problemática de la cuenca del lago de Valencia, mostró el estado del embalse Pao Cachiche, el abandono de las plantas tanto las depuradoras como las de tratamiento. Indicó cómo estas últimas están obligadas a hiperclorar y a utilizar una cantidad muy alta de hidróxido de aluminio, para que al final el usuario reciba un agua apta para el consumo humano. El movimiento por la calidad del agua tiene año y medio denunciando la situación ante todas las instancias, incluso en la Comisión Permanente de Ambiente y Cambio Climático.

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EL VIADUCTO DE LA CABRERA «El viaducto no goza de buena salud, el suelo donde se funda es poco resistente, el incremento de la magnitud de la carga se ha cuadruplicado… la sismicidad de la zona es muy elevada… y sólo se ha rehabilitado en un 30%.» Así explicó el problema del viaducto La Cabrera el Ing. Giovanni Bianco. ¿Cuánta antelación se requiere para que comiencen los trabajos? ¿Se repetirá la historia del Viaducto de la Guaira?

LA VOLUNTAD POLÍTICA Ni los funcionarios de 1995 ni ninguno de los que han pasado por el Ministerio e Hidrocentro han realizado las obras necesarias que permitan el ejercicio del derecho a vivir en un ambiente sano y ecológicamente equilibrado: cumplir con la ley de Agua y ley orgánica para la prestación de los servicios de agua potable y de saneamiento como mínimo. Las alternativas técnicas están a la orden y lo que falta es la voluntad política. Hace cinco años el TSJ dictó una sentencia para la indemnización de algunos de los vecinos del sur de Maracay: Mata Redonda y La Punta, esa sentencia tampoco se cumple. Lejos de ser pájaros de mal agüero la ley de ejercicio de la Ingeniería especifica que estos profesionales son asesores del Estado venezolano. El problema de la cuenca del lago de Valencia, hace tiempo dejó de ser ambiental.

Los ausentes del foro fueron los representantes de los ministerios de Ambiente e Infraestructura. ¡Señores, el lobo ya llegó!

12.09.11 Tal Cual

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