El diputado de la Asamblea Nacional (AN) e integrante de la comisión de Energía y Petróleo, Antonio Barreto Sira, anunció que pedirá ante el Hemiciclo legislativo una investigación profunda sobre la presunta explosión que se registró en la noche del martes 8 de julio en la planta de Pdvsa Gas, en el municipio Anaco de Anzoátegui.
«El estallido, denunciado por la población y escuchado en la planta compresora de Gas en la población anaquense de Santa Rosa, es un ejemplo más de las malas condiciones de trabajo y de la escasa pericia que existe dentro de la Estatal petrolera», señaló el diputado.
“Nuestra responsabilidad como diputado, nuestro deber como residente de Cantaura y vecino de Anaco, es elevar esta situación a la Asamblea Nacional, porque no es la primera vez que ocurre un incidente de esta magnitud”.
Indicó que la presunta rotura en la tubería de 26 pulgadas de la empresa es otro llamado de atención que se debe tomar en cuenta sobre el cómo se están llevando adelante las operaciones dentro de Pdvsa.
El parlamentario recordó que durante los años 2012 y 2013 se registraron una enorme cantidad de derrames de crudo en los municipios Anaco y Freites de la entidad anzoatiguenses, debido a errores en las labores de la empresa de hidrocarburos.
Durante el 2012, precisó, se registraron 10 incidentes entre los estados Monagas y Anzoátegui.
“Podemos recordarlos todos, el 2 de enero se registró uno La Pica, en Monagas, el 4 de febrero se reportó la ruptura de una tubería en el Complejo Jusepín también Monagas, para el 27 de febrero sucedió un derrame de petróleo en el rio Guanipa, municipio Freites de Anzoátegui, el 1 de marzo hubo un bote de crudo en el sector indígena Tascabaña, para el 6 de marzo otro derrame de crudo esta vez en el Complejo José Antonio Anzoátegui, nuevamente Monagas sufrió los embates de la negligencias y el 2 de abril se presentó la ruptura de una tubería de PDVSA en la entrada de Punta Mata, sector La Orchila. 13 días después se reportó un derrame en la estación de flujo San Tomé, que afectó al rio Guanipa, al sur anzoatiguense”
Prosiguió rememorando que el 16 de abril del 2012 la Alcaldía del municipio Uracoa, en Monagas, notificó sobre un derrame en Campo El Bombal, el 12 de julio se informó sobre dos derrames en el área 2 de las localidades Bare 1 y Bare 4, a 400 kilómetros de El Tigre, en Anzoátegui y el 12 de agosto ocurrió una fuga en el oleoducto que va desde Patio de Tanques Oficina al Complejo de Jose, otra vez en Anzoátegui.
El diputado recordó la denuncia que en el 2013 realizó Alexander Cabrera, vecino y dirigente social de San Diego de Cabrutica, al sur de Anzoátegui, quien denunció ante la opinión pública la contaminación ambiental que afectó a las poblaciones de Mapirito, La Antena, El Escondido, Guatire, Santa Cruz y Santa Clara debido al derrame de una fosa donde se almacena el crudo, cayendo los elementos contaminantes al Río Morichal, vía a la localidad de Zuata.
Para Barreto Sira otro de los casos más emblemático es el de las emanaciones de gas que permanentemente existe en la población de Mare-Mare desde donde se está contaminando todo el aire que se respira en gran parte del municipio Freites.
Seguridad
Barreto Sira manifestó que Pdvsa en Anzoátegui vive de explosión en explosión, “primero le caen rayos y centellas encima, se rompen las tuberías, colapsan las calderas, y mientras todo esto ocurre el coque se sigue acumulando de forma alarmante en el Criogénico de Jose, todo un caos ambiental”.
El legislador fue enfático al exigirle a la empresa de hidrocarburos más y mejores políticas de seguridad industrial para garantizarles la vida a los trabajadores de la empresa petrolera, como a los miles de anzoatiguenses y venezolanos que viven en las adyacencias de las distintas plantas de Pdvsa.
“Lo hemos dicho. La zona Oeste, Píritu y Peñalver, e inclusive la zona sur de Barcelona sufren de una elevadísima contaminación ocasionada por el Criogénico, además el municipio Sotillo es una trampa mortal debido a que no posee vía de escape ni planes de contingencias ante una posible calamidad en la Refinería de Puerto La Cruz”.
Alertó igualmente sobre la posibilidad que se agudice en la región el ya notorio desabastecimiento de gas doméstico lo que repercutiría en la ya mermada calidad de vida de las familias de la entidad.
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En junio de 2010 un equipo de Provea se trasladó a las comunidades Tascabaña I y Tascabaña II, en el estado Anzoátegui, para constatar las reiteradas denuncias que venía realizando la comunidad indígena Kariña sobre contaminación de aguas por parte de Pdvsa. En aquella oportunidad la población indígena ratificó su denuncia afirmando que emanaciones de gas contaminaban el río Tascabaña. Expresaron que la empresa estatal había realizado muchas promesas de resolver la situación; sin embargo, el problema no solo continuaba sino que se había agudizado. Cuatro años después la comunidad se reiteran las denuncias contra la estatal por otra grave situación, y PDVSA sigue sin responder.
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