Un trabajador de la construcción fue asesinado a tiros en la mañana del 26.05.10 cuando se dirigía a sus labores en el conjunto habitacional El Gran Maguey, en El Paraíso de la ciudad porteña.
Manuel José Cabello Amundarain (18) salió de su residencia en la Vecindad de El Chavo a las 8:00 am. En la calle Salón fue interceptado por un individuo que iba en una motocicleta y otros en un automóvil.
El sujeto que conducía la moto sacó un arma de fuego y le disparó por la espalda. Las balas le salieron por el pecho. Los criminales huyeron del lugar y dejaron mortalmente herido a Cabello, quien fue recogido por unos conocidos que lo llevaron al hospital de Guaraguao, donde murió a los pocos minutos de su ingreso.
Posteriormente, una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) de Puerto La Cruz, trasladó el cuerpo de la víctima a la morgue del Razetti.
Un trabajador de nombre Pedro dijo que los hombres que le salieron al paso a Miguel cobran peaje en las inmediaciones de la obra y señaló a uno apodado “júnior”, como el autor de los disparos.
Expresó que este sujeto está implicado en otro homicidio ocurrido el 7 de noviembre de 2009 en Puerto La Cruz.
La directora de la Policía Municipal de Sotillo, Yraima Marea, informó que el muchacho estaba inscrito en un listado para comenzar a trabajar como contratado.
Búsqueda
Marea señaló que el homicida está identificado pues permanecía en el portón de El Gran Maguey. “Estas son personas que se creen dueñas de la obra, y pretenden amedrentar a los habitantes de sectores cercanos”, indicó.
Aclaró que el homicida no ha sido capturado. Presume que el asesino y sus cómplices están relacionados con lo que queda de la banda de “javielito”.
Agentes de inteligencia iniciaron las averiguaciones para identificar a los delincuentes y capturar al homicida.
Luis José Cabello mencionó que su primo Manuel José estudiaba quinto año de bachillerato en el liceo Calatarava en Puerto La Cruz y trabajaba como obrero para ayudarse con los gastos.
Desconoce cómo sucedieron los hechos, porque no se encontraba en el lugar. Comentó que estaba trabajando cuando le avisaron sobre lo sucedido.
Siento que el corazón se me estremece. 18 años, era un niño… creo que estamos completamente deshumanizados, espero que los expertos, sociologos, antropologos, sicologos y siquiatras esten evaluando esta saña con la cual estan actuando quienes asesinan todos los dias.
debe haber una explicación y que esa expllicacion sea testimonio y capitulo de estudio algun dia, para reconstruir esta sociedad, que espero sea la sociedad del futuro en que vivira la hija que me queda y su generación.
es demasiado preocupante la violencia, es aterrador.