El Ministerio de Industrias y la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) no cumplieron con el pago de la diferencia de utilidades prometida para este 11 de abril y pendiente desde mediados del mes de febrero.
Aunque el presidente Nicolás Maduro anunció la semana pasada que había aprobado 5 mil 900 millones de bolívares para cancelar pasivos a los trabajadores de la industria del aluminio, el personal no recibió el depósito de la deuda este viernes.
El anuncio del primer mandatario generó satisfacción en un sector sindical que agradeció el gesto del Ejecutivo. El presidente de la CVG, Carlos Osorio, también dio gracias vía Twitter al presidente Maduro al “cumplir con el compromiso” hecho con los trabajadores.
Empero, la dirigencia sindical desconoce por qué no se hizo efectivo el depósito de la deuda.
En la reductora el secretario general del Sindicato de Trabajadores de CVG Alcasa (Sintralcasa), Henry Arias, atribuyó el incumplimiento a un “saboteo” propio de la campaña sindical que se ha emprendido en la empresa en víspera de los próximos comicios.
“Van a pagar después de Semana Santa. Aquí lo que pasa es que el gerente de personal y el jefe de relaciones laborales son del Movimiento 21, los tipos que están quieren ser gerente y también quieren ser sindicalista”, dijo.
En otras empresas, como en CVG Bauxilum, la estatal adelantó la cancelación de otras deudas que ya se habían cancelado en el resto de la industria, mas tampoco cumplió con la diferencia de utilidades.
El secretario de trabajo y reclamo del Sindicato de Trabajadores de CVG Carbonorca (Sutracarbonorca), Robert Pinto, confirmó que ninguna autoridad del Ejecutivo había dado razones del retraso e informó que, además de la diferencia de utilidades, no se ha cancelado el bono a los trabajadores que salieron de vacaciones colectivas, así como tampoco el recalculo del bono de alimentación, los descansos legales y contractuales, la diferencia por concepto de meritocracia, entre otros.
Pinto cuestionó a los dirigentes que “cada vez que aprueban algo salen agradeciendo. Pareciera que se arrastraran de acuerdo a las circunstancias que le permitan salir a la palestra del movimiento obrero, esa no es la vía”, dijo.
Protesta en frío
En protesta por el incumplimiento, los trabajadores de CVG Alcasa cerraron el portón principal de la fábrica junto a la mayoría del comité ejecutivo del sindicato.
Empero, la manifestación no impacta en las operaciones de la fábrica que opera por debajo del 30 por ciento de su capacidad instalada, y cuya mayoría de las áreas están inoperativas como parte de un proceso de adecuación tecnológica.
En el sector aluminio la gerencia dio vacaciones colectivas desde este viernes 11 de abril hasta el 21 de abril a la mayoría del personal administrativo. (Clavel Rangel, Correo del Caroní, 21.04.14)