Según declaraciones del coordinador general de Movimiento 18, Ronald Figueredo, la actual directiva de Orinoco Iron sigue haciendo caso omiso a quejas sobre políticas opresoras y, a su vez, sostiene que no demuestran transparencia ante los presuntos hechos de corrupción e irregularidades administrativas.
Figueredo, en la rueda de prensa pautada para este domingo, resaltó el olvido del contrato colectivo, el cual, según indicó, este próximo 8 de marzo cumple 6 años sin cumplirse.
En este orden, mencionó el inicio de una gestión para intercambiar palabras con el vicepresidente de la República, Aristóbulo Istúriz, y tratar las problemáticas que se han venido acumulando a nivel laboral en la empresa. Para dicha pauta aún no se tiene fecha.
Figueredo, que también forma parte del comité de salud y seguridad, expresa alerta ante la falta de compromiso y cuidado por parte de la directiva, que corresponde a los accidentes laborales y enfermedades como lo indicó: trastorno músculo-esquelético y afecciones respiratorias; de las cuales, según continuó, no sea han escuchado respuestas de las autoridades.
Por otro lado, no tardó en dar a conocer que los aspectos operativos de la compañía estaban en crisis. Según comenta, equipos como compresores y un reformador requieren de una gran inversión por el riesgo a la poca estabilidad empresarial.
A su vez, hizo un llamado al ministro de industria y comercio, Miguel Pérez Abad, para que garantice la operatividad y el mantenimiento de dichos mecanismos.
“Los trabajadores de Orinoco Iron hemos sido respetuosos”, manifestó como mensaje a la directiva de la factoría. Asimismo, indicó que si continuaban las irregularidades y desviaciones, junto con lo que llamó la implementación de una política errada, se tomarán como represalia posibles movilizaciones hacia las puertas de CVG, y acercamientos a la capital venezolana.
