109746_338x198_0277374001459480483

Durante dos horas, conductores de los Buses de Tránsito Rápido protestaron ayer dentro del Complejo Polideportivo Simón Bolívar de Barcelona para exigir mejoras salariales.

Conductores de los Buses de Tránsito Rápido (BTR) paralizaron sus actividades ayer durante dos horas para exigir mejoras salariales.

La acción de protesta se inició a las 5:30 de la mañana dentro del Complejo Polideportivo Simón Bolívar de Barcelona, donde permanecieron hasta las 7:30 am a la espera del gobernador del estado Anzoátegui, Nelson Moreno.

Uno de los manifestantes y empleado de las unidades del Sistema Socialista de Transporte José Antonio Anzoátegui (Transanzoátegui), Jorman Maco, aseguró que son 125 trabajadores los afectados.

“El gobernador llegó al complejo polideportivo y nos pidió que retomáramos nuestras labores y le enviáramos las exigencias por escrito para estudiarlas”.

Comentó que los empleados carecen de contrato colectivo y no se les ha cancelado el monto correspondiente por laborar en días feriados. Además, solicitan un aumento salarial.

Fue a las 7:30 de la mañana cuando los conductores retomaron sus actividades, pero antes designaron una comisión para discutir los puntos que serán elevados al mandatario regional.

Otro de los choferes que manifestaron su malestar el día de ayer fue Luis Torres, quien explicó que de las 50 unidades Yutong que fueron asignadas al servicio de transporte rápido durante su inauguración, sólo están en funcionamiento 25.

El resto aparentemente presenta fallas y aún no han sido reparadas por la falta de repuestos, mientras otras presuntamente carecen de baterías y cauchos.

Espera

El ama de casa Zoraida Román, habitante del sector Pueblo Nuevo de Puerto La Cruz, comentó que estuvo en la parada de Chuparín, ubicada en la avenida Municipal de esa jurisdicción, desde las 6:00 de la mañana, y fue a las 8:00 am cuando pudo montarse en la unidad que la llevaría a Barcelona. “No pasaba ni un autobús y la cola era descomunal.

Algunos optaron por montarse en los autobuses tradicionales. Yo decidí esperar porque es el que me deja más cerca de mi trabajo y es más económico”, puntualizó.

A su lado estaba Marta Aguirre, quien comentó que sólo contaba con la tarjeta del BTR para trasladarse, pues en ese momento no tenía efectivo disponible.

“Tuve que esperar una hora. A las 8:00 fue que pasó el primer autobús, después todo se normalizó. Era como que si nada hubiese pasado”.

Aguirre aseguró que cada vez ve menos unidades de transporte y eso se ha notado en el tiempo que cada pasajero debe esperar en las paradas.

El Tiempo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *