Delgados, débiles y desaliñados, así se encuentran los ex trabajadores de la cementera nacionalizada Cemex, quienes tienen dos mil 160 horas en huelga de hambre.
Los cinco ex empleados, quienes iniciaron su protesta el pasado 4 de noviembre, aún se mantienen a las puertas de Planta Mara, la sede de la empresa ubicada en el municipio San Francisco.
El pago de pasivos laborales pendientes será lo único que acabará con la huelga de hambre, aseguró Ríchard Bracho, uno de los cinco manifestantes.
El representante de la Asociación Civil para la Defensa de los Ex trabajadores de la Industria Cementera (Asocemento) afirmó que durante los 90 días que lleva la protesta, la empresa jamás realizó ningún pronunciamiento orientado a la resolución del conflicto laboral.
Hasta ahora sólo organizaciones sindicales y dirigentes políticos se acercaron para entregar propuestas para solucionar la situación o demostrar apoyo.
Esta semana se tiene previsto que el Consejo Legislativo del Estado Zulia (CLEZ) se presente en el lugar de la protesta para hacer entrega de algunos medicamentos.
El Parlamento regional analizará además la posibilidad de realizar una sesión extraordinaria para tratar el tema desde el sitio donde se desarrolla la huelga.
«Estamos esperando que ellos -diputados del CLEZ- vengan, porque nosotros estamos muy débiles como para ir hasta allá», explicó el representante de Asocemento.
La semana pasada la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) visitó a los huelguistas, a quienes les prometió elevar sus denuncias a instancias internacionales. (Daniela García, La Verdad, 02.02.11)
