El secretario general del Sindicato Único de Empleados Públicos de la Corporación Venezolana de Guayana (SunepCVG), Juan Gómez, cuestionó la gestión que preside el general Carlos Osorio, por considerar que ha cumplido los procedimientos regulares dentro de la empresa.
A cien días de su nombramiento, el presidente mantiene aplazada la negociación del contrato colectivo, sin cancelar los 40 mil bolívares que se adeudan a los trabajadores activos y el 50% a los jubilados por concepto de dicho retraso.
“Ya tenemos cuatro años sin discutir el contrato colectivo, tomando en cuenta que desde 2009 tenemos la notificación que el proyecto está avalado por el Ministerio del Trabajo y a la fecha, ninguno de los presidentes que hemos tenido ha tomado la decisión de instalar la mesa de negociación, violando el derecho de los trabajadores”, indicó.
Informó que tienen cuatros años sin recibir dotación de uniformes, al mismo tiempo que no han sido canceladas las evaluaciones por desempeño del segundo semestre de 2012 y el primer trimestre de 2013: “el pago tiene que ser para todos los trabajadores con retroactivo a la fecha de 2013”.
Igualmente, subrayaron que esperan el pago por la diferencia de los intereses de las prestaciones sociales y que la empresa mantiene retenidas las cuotas sindicales desde hace cinco meses.
Seguro social
Gómez, destacó que la Corporación Venezolana de Guayana no ha efectuado el pago al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), por lo tanto, se mantiene paralizado el registro de los pensionados.
La situación se repite en el caso del seguro de vehículos: “nos descuentan el seguro pero no le cancelan a los asegurados cuando tienen algún siniestro”.
La CVG cuenta con 480 trabajadores contratados a escala nacional, y de acuerdo a la dirigencia sindical: “no hay intención de pasarlos a nómina fija”.
Sin embargo, aseguran que el presidente Osorio, ha facilitado el ingreso de 22 personas, entre militares y civiles, que actualmente perciben un salario de 18mil bolívares. “En CVG existen profesionales capaces de sacar adelante la empresa».
Deterioro del Hato Gil
Voceros de Sunep CVG, denunciaron el elevado nivel de deterioro que presenta el Hato Gil.
Aseguran que la inclusión de las comunidades dentro de la estación experimental representa un riesgo para los trabajadores y las personas que permanecen dentro del lugar: “es una situación preocupante porque es una estación que está siendo invadida por personas ajenas a la institución”.
Dijeron que la pérdida de esta unidad de producción afectaría directamente a los estados Anzoátegui, Amazonas, Delta Amacuro y Bolívar.
Finalmente, Gómez exhortó a los trabajadores a mantenerse unidos y luchar por la recuperación de CVG.
Cifra
4 años sin discutir contrato colectivo; 40 mil bolívares adeudados a los trabajadores; 50% correspondiente a los jubilados; 480 contratados a escala nacional. (Anyelis Arredondo, Nueva Prensa de Guayana, 30.08.13)
