Luego de encuentros con representantes de los diferentes sectores y con una comisión del Estado venezolano, el Comité de aplicación de normas de la OIT presentó un informe, el pasado miércoles 16 de junio, que solicita al gobierno garantizar el respeto de los derechos de los trabajadores para ejercer sus actividades en un clima de paz, ausente de miedo, amenazas y violencia.
«Nos preocupa las alegaciones de actos de violencia contra los líderes de los empleadores y de los sindicatos, la criminalización de las actividades legítimas de los sindicatos y otras restricciones de las libertades civiles necesarias para el ejercicio de los derechos de los sindicatos», señaló el Comité de aplicación de normas de la OIT.
En el informe, también se rechaza el clima de intimidación sufrido por los líderes de los empleadores a nivel personal: las expropiaciones de tierras, medidas contra las propiedades y contra la sede de Fedecameras.
La OIT solita al Gobierno que «no interfiera con los asuntos de las asociaciones de trabajadores y empleadores». Igualmente, la organización urge al ejecutivo venezolano que establezca un espacio de diálogo tripartito con los representantes de los empleadores y de los trabajadores (El Universal, 17.06.10).