Mario Villegas (Quinto Día)
“La burocracia sindical y la tecnocracia de Petróleos de Venezuela se defienden mutuamente en función de mantener sus privilegios”
“Los números dicen que los petroleros tenemos salarios de hambre. Más sacrificios, imposible”
“La ‘tercerización’ ha aumentado porque el outsourcing es un negocio rentable ya que las empresas y consultoras dan comisiones en dólares a quienes las contraten”
José Bodas, secretario general de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros, sostiene que los más de 108 mil trabajadores de la principal industria nacional ganan salarios de hambre, aparte de que Petróleos de Venezuela viola la legislación laboral y la contratación colectiva con la complicidad de la dirigencia sindical “roja-rojita”.
De acuerdo con Bodas, los 67 mil afiliados a la FUTPV están a la espera de las elecciones sindicales, pues la directiva tiene más de año y medio con el período vencido, mientras algunos sindicatos de base tienen más de tres años sin realizar comicios internos.
La mora, según Bodas, se debe al terror que Will Rangel, presidente de la federación, y sus camaradas pesuvistas, tienen a su inminente derrota.
-Sin apasionamientos, ¿Cómo evalúa el legado petrolero de Hugo Chávez?
-Por un lado, vemos un experimento fallido de recuperar la soberanía petrolera a partir del 2007 con la chucuta nacionalización de la Faja Petrolífera del Orinoco, al entregar el 40% de la propiedad del petróleo venezolano a las trasnacionales a través de empresas mixtas chinas, francesas y norteamericanas, entre otras. Y por el otro, en ese legado hay un ataque despiadado a la autonomía del movimiento sindical para la destrucción de la convención colectiva petrolera.
-¿Cuál es su balance de la gestión de Rafael Ramírez en la Industria?
-Ha sido una de las gestiones más nefastas, pues con un barril de petróleo a 120 dólares Petróleos de Venezuela adquirió una deuda de más de 45 mil millones de dólares, que no fueron invertidos en el mantenimiento de la Industria.
-¿Y cómo caracteriza la gestión del actual presidente de PDVSA, Eulogio Del Pino?
-No hay ninguna diferencia sustancial con otras gestiones, ya que no hay ninguna participación protagónica de los trabajadores, ni de los técnicos ni de los profesionales en la Industria.
-¿En la industria petrolera hay más o menos corrupción que en el resto de la administración pública?
-Es igual. La corrupción es generalizada. Tenemos el caso de Francisco Illaramendi, quien se robó 2 mil millones de dólares del Fondo de Pensiones de los Trabajadores de PDVSA, está detenido en Estados Unidos y hasta ahora no se ha recuperado ese dinero, entre otros casos.
-¿Hay complicidad sindical en las corruptelas y el mal manejo de la Industria?
-Sin ninguna duda. Al tener dirigentes sindicales miembros de la Junta Directiva de PDVSA, como es el caso de Will Rangel y otros, es claro que hay complicidad. Ambos se defienden: La dirigencia sindical roja-rojita, como la bautizó Ramírez, defiende a la tecnocracia roja-rojita y ésta a su vez defiende a la burocracia sindical. Todo esto en función de mantener sus privilegios.
-¿Cuánto de la lluvia de petrodólares le salpicó a los trabajadores petroleros en estos 17 años?
-Absolutamente nada. Lo que tiene PDVSA con los trabajadores son pasivos laborales y deudas, como por ejemplo, tiene ocho años que no cancela la compensación salarial por antigüedad, que en la industria se conoce como “La Tablita”. Tiene una deuda de más de 40 mil viviendas que no ha cumplido, pese a que son beneficios contractuales. A la Nómina Mayor no contractual le robaron la retroactividad de las prestaciones sociales. Los sábados laborados no se cancelan como día legal y las vacaciones no las pagan a salario normal sino al básico. Todos los sistemas de pagos están en más de 60% por debajo de lo que establece la ley en cuanto a bonos nocturnos, tiempo de viaje, pago de horas extras, entre otros. Todo esto es producto de una dirigencia roja-rojita subordinada políticamente a los patronos y al Gobierno.
-¿No es un privilegio tener un empleo en PDVSA?
-Es un privilegio, ya que se labora en la principal industria nacional que produce el 96% de las divisas que entran al país, pero no es así en lo referente a las reivindicaciones, la libertad sindical e inclusive la estabilidad laboral, porque lo que hay es una criminalización de las protestas reivindicativas y sociales, y de las luchas por la autonomía y la libertad sindical. Los trabajadores petroleros devengan hoy un salario mensual de 17 mil 280 bolívares, lo cual equivale a 576 bolívares diarios. Un petrolero gana 78 dólares mensuales, 2,6 dólares diarios, calculados al cambio oficial. Pero si lo vemos al dólar real, son 14,4 dólares mensuales y 0,48 centavos de dólar diarios.
-¿Por qué PDVSA no ha acabado con la llamada ‘tercerización’?
-No sólo que no ha acabado con la ‘tercerización’, sino que la ha aumentado y la aumenta en los taladros, en las refinerías, en los muelles, en los terminales marítimos, porque el outsourcing es un negocio rentable para la tecnocracia roja-rojita, ya que esas empresas y consultoras dan comisiones en dólares a quienes las contraten. Todo esto ocurre en contravención a la Ley que prohíbe los ‘tercerizados’ y con complacencia de la burocracia sindical.
-¿A qué se debe que no hayan sino renovadas las autoridades sindicales de la FUTPV?
-La FUTPV tiene más de 18 meses con el período vencido y hay sindicatos de base, como el de Puerto La Cruz, que tienen más de tres años sin elecciones. Esto es por el terror que le tiene la burocracia roja rojita a las elecciones, pues sabe del gran desprestigio y desprecio de que goza entre los trabajadores por estar arrodillada al patrono durante muchos años. La peor traición es haber entregado nuestras reivindicaciones en los últimos cuatro contratos colectivos, que los trabajadores les van a cobrar y se va a expresar el día de las votaciones. El rechazo es masivo contra Will Rangel y quienes lo han acompañado, incluso algunos que ahora dan declaraciones contra este para salvar su pellejo, pero también están subordinados al patrono, al PSUV y a las transnacionales. Nuestra corriente C-Cura está llamando a constituir los comités de base y a exigir la contratación colectiva y elecciones en la FUTPV y los sindicatos de base. Queremos refundar el movimiento obrero petrolero mediante elecciones transparentes, libres, democráticas y sin la intervención del Estado, ni de los patronos públicos ni privados.
-¿Qué es lo peor de la actual caída de los precios petroleros? ¿Tiene esa caída algún lado positivo?
-Lo peor es que se reducen en más de 60% los ingresos del país. En más de cien años de historia petrolera hoy Venezuela depende más que nunca de esa renta. Pero cuando tuvimos el petróleo a 120 dólares, los trabajadores y el pueblo tampoco vimos que eso se invirtiera en el país para resolver los problemas y la crisis económica y social. Por el contrario, se robaron más de 300 mil millones de dólares en estos 17 años.
-¿A qué sacrificios están dispuestos los trabajadores petroleros ante la crisis económica nacional?
-Los números dicen que los trabajadores petroleros tenemos un salario de hambre. Los únicos que estamos pagando esta crisis somos los trabajadores y los petroleros en particular, ya que el salario no alcanza ni para cubrir la canasta alimentaria, que hoy está en 108 mil bolívares y sigue subiendo. Los únicos que estamos trabajando a pérdida somos los trabajadores, ya que con nuestros salarios no podemos alimentar a nuestras familias. Más sacrificios, imposible.
Quién es quién
José Bodas nació el 6 de diciembre de 1969 en Maracaibo, estado Zulia.
Es Operador de Planta de Procesos Petroquímicos en la Refinería de Puerto La Cruz, con 26 años de servicio. En 2001 se graduó de Abogado en la Universidad Santa María. Ejerce el cargo de Secretario General de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela, elegido por las bases el 1° de octubre de 2009.
Es miembro de la Corriente Clasista, Unitaria, Revolucionaria y Autónoma (C-Cura) y del Comité Central del Partido Socialismo y Libertad, de orientación trotskista.
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@mario_villegas