Artículo de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas. Navi Pillay
En las últimas cinco décadas, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha sido una luz de esperanza en el continente, dando recurso a un sinnúmero de víctimas de violaciones de derechos humanos, contribuyendo a la consolidación de instituciones democráticas e inspirando el desarrollo de la maquinaria de derechos humanos en todo el mundo.
Celebrada la Asamblea General Extraordinaria de la OEA, en Washington, para votar reformas a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), hago un llamado por las víctimas y por los derechos humanos de todas las personas.
En particular insto a todos los miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) a que la reforma del sistema interamericano de protección de derechos humanos no afecte su independencia y su capacidad de defender a las víctimas y a las personas en riesgo de violaciones de derechos humanos.
En todos los países, en todo el continente Americano, todas las víctimas de violaciones a los derechos humanos deben ser protegidas. Es nuestra obligación trabajar para que esto sea real.
Nosotros como promotores e impulsores del sistema universal de derechos humanos trabajamos conjuntamente con el sistema americano, complementándonos mutuamente para maximizar la protección, promover los derechos humanos y prevenir violaciones.
Los miembros de la OEA tienen una gran oportunidad de reforma para fortalecer este sistema ejemplar de derechos humanos.
La decisión que tomen determinará la fortaleza del Sistema de Derechos Humanos, siempre y cuando logren promover el acceso universal para todos los ciudadanos del continente, en total respeto de la autonomía de la Comisión.
Con la decisión, y si optan por fortalecer el sistema, buscarán mejorar progresivamente sus políticas y prácticas en respuesta a las necesidades de las víctimas y las preocupaciones de los Estados Miembros.
Hoy también se definirán los recursos para la Comisión, y si esos recursos son los necesarios para permitir una contribución aún mayor a la protección de los derechos humanos en las Américas, la Comisión se fortalecerá aún más.
Finalmente quiero recordar que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos fue creada por la OEA en 1959 como un órgano autónomo, con la misión de la promover y proteger los derechos humanos en el continente americano y actuar como cuerpo consultivo de la OEA . Junto con la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la Comisión es una institución del Sistema Interamericano de protección de los derechos humanos, muy importante para el desarrollo en el mundo de los derechos humanos.