La Plataforma Interamericana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo (PIDHDD) se adhiere a la declaración pública de múltiples organizaciones regionales e internacionales de derechos humanos que, desde fines del año pasado, demandan de las autoridades marroquíes a poner en libertad a los 21 presos políticos saharauis que cumplen largas penas, entre 20 y 30 años, y cadena perpetua, como consecuencia de las protestas de noviembre del 2010, en Gdeim Izik, en el Sáhara Occidental, bajo ocupación marroquí.
Los activistas saharauis fueron condenados por la Corte Militar de Rabat, luego de un proceso injusto, basado en confesiones obtenidas bajo tortura, sin ninguna otra evidencia que los relacione con las víctimas mortales en las protestas.
Los activistas saharauis no sólo fueron víctimas de un error judicial sino que enfrentaron un juicio plagado de omisiones e irregularidades. Los acusados alegaron que habían sido torturados por la policía y obligados a firmar sus declaraciones; el juez nunca ordenó que se investiguen esas denuncias; la fiscalía no presentó testigos ni pruebas materiales y la legislación marroquí niega a los civiles en juicios militares la posibilidad de una apelación, en los términos establecidos por la legislación internacional.
Las autoridades marroquíes deben tener presente que las normas internacionales de derechos humanos determinan que los acusados víctimas de error judicial deben ser indemnizados. Por otra parte, el juzgamiento a civiles en tribunales militares viola los tratados internacionales de derechos humanos, en especial el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, suscrito y ratificado por Marruecos.
No obstante, el Tribunal de Casación de Marruecos, luego de aproximadamente tres años, decidió el pasado 27 de julio que los activistas saharauis deben ser juzgados de nuevo ante el Tribunal de Apelación de Rabat, aun cuando no se ha fijado fecha para el nuevo juicio. El Art. 546 del Código de Procedimiento Penal marroquí dispone que una petición de esta naturaleza deba ser resuelta en un plazo de tres meses a partir de la presentación del recurso.
La Plataforma Interamericana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo (PIDHDD), organización de carácter regional con presencia en quince países de la región, insta a las autoridades marroquíes a que los activistas saharauis sean sometidos sin dilaciones a un nuevo juicio, conforme a las normas internacionales de derechos humanos; a que garanticen que no se admitirán en los procedimientos las declaraciones obtenidas bajo coacción y tortura, y a que éstas sean investigadas por mecanismos independientes e imparciales.
La Plataforma Interamericana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo (PIDHDD) aboga para que los activistas saharauis sean puestos en libertad inmediata mientras esperan el nuevo juicio, que deberá ser público y con la presencia de observadores internacionales.-