En opinión de Provea las diferentes situaciones de saqueos a establecimientos, ocurridas en los últimos días en varios puntos de la geografía venezolana, reflejan el aumento de la desesperación de la población, especialmente la de sectores más vulnerables, ante la ausencia de políticas efectivas por parte del Ejecutivo Nacional para garantizar el acceso a los alimentos.
Como se reflejó en el Informe Anual 2015 realizado por Provea, la inflación en alimentos del año 2015 fue mayor del 300%, lo cual sumado al aumento del desabastecimiento de los productos de consumo masivo, así como al incumplimiento en las metas oficiales para aumentar la producción y cosecha de alimentos, ha agravado en el primer semestre del 2016 las dificultades para adquirir los rubros esenciales de la canasta alimentaria. Sin la voluntad de reconocer la gravedad de la situación, la vocería oficial insiste en la tesis de la «guerra económica» como causa de la crisis, en la que el gobierno supuestamente estaría siendo víctima de una conspiración y sabotaje internacional. Este argumento ha sido institucionalizado en el decreto de estado de excepción y emergencia económica, aprobado el pasado 13.05.16, cuyos considerandos promueven la doctrina de la seguridad nacional y apartan a la gestión de Maduro de la democracia. En ese ordenamiento, además, se crean los denominados «Comités Locales de Abastecimiento y Producción» (CLAD), que han sido percibidos por la ciudadanía como responsables de una mayor escasez de alimentos.
Ninguna política pública puede ser promovida de espaldas a el sentido común de la gente. La insistencia en medidas que no han solucionado la crisis ha aumentado los conflictos en diferentes puntos del país, pues el mensaje percibido por la población es que lejos de solucionarse los problemas continuarán agravándose en los próximos días. En este sentido el gobierno de Nicolás Maduro es el principal responsable del aumento de la conflictividad y violencia en el país.
Según el monitores realizado por Provea, en conjunto con otras organizaciones de derechos humanos, durante el día 14.06.16 se registraron saqueos, conatos y protestas en Cumaná, Puerto Ordáz, Palo Negro (Maracay), San Antonio del Táchira, Ureña, Lagunillas (Mérida, y en tres puntos diferentes de la ciudad de Caracas (Catia, La Vega y La Urbina). El catalizador común de cada una de estas situaciones ha sido la posibilidad que la gente no obtenga ningún tipo de alimentos, a pesar de haber permanecido durante largas horas en una cola esperando acceder a los rubros con precio regulado. Según la opinión del primer mandatario estas manifestaciones tendrían motivaciones políticas y no sociales: » “En Venezuela hay paz (…) Han generado ataques miserables en algunas ciudades y en todas las ciudades los encabezan gente de la ultraderecha que ya están presos; y después no van a decir que son perseguidos políticos. En todas las grabaciones aparecen moviendo dinero” afirmó durante una alocución en la noche del martes.
Según la información corroborada por Provea hasta el mediodía del 15.06.16 se habían confirmado 5 personas fallecidas en el contexto de la represión a las manifestaciones por acceso a los alimentos. Estas consecuencias corroboran la ausencia de una política democrática y respetuosa de los derechos humanos para canalizar las demandas ciudadanas.
