Este viernes 13 de noviembre el Tribunal Primero (1º) en Función de Juicio, Extensión Puerto Cabello efectuará el juicio oral y público JP111337-2012 por el homicidio calificado con alevosía por motivos fútiles o innobles en grado de complicidad correspectiva, uso indebido de arma de guerra, simulación de hecho punible, quebrantamiento de pactos y tratados internacionales, en contra de Talavera Pérez Orlando Alcides, Matos Vásquez Javier Alberto, Briceño Bessio José Miguel, Velásquez Manosalva Marcos Alexander, Arias Álvarez Willian Javier, Flores Millán Héctor Javier, Colmenares Gómez Yoiser José, Gordones Hernández Gerson Daniel, Meléndez Tovar Ronny Rafael, Yegres Carreño Roniel Orlando, Soto Dávila Yoangel José, Velasco Ochoa Rómulo José, Aponte Perdomo Oscar, Ríos Priori Ronald Alberto. Inspectores Jefe: Heredia Valera Joel Alberto y Bastidas Zárraga Erasmo José, funcionarios de la Policía Municipal de Puerto Cabello, presuntamente implicados en la muerte de Willy Chirinos González, el pasado 2 de junio de 2010.
La Red de Apoyo por la Justicia y la Paz, durante 30 años ha dado acompañamiento a personas víctimas y familiares de abuso policial y militar y en esta oportunidad manifiesta solidaridad con la familia Chirinos González por su lucha emprendida durante más de cinco años tratando de encontrar justicia por el abominable asesinato de su hijo. La organización exige además, celeridad a este juicio que ha sido diferido en varias oportunidades.
Relato de hechos
Testigos y familiares de la víctima cuentan que el día 02 de junio de 2010, el joven Willy Rafael Chirinos González, se encontraba durmiendo en su residencia ubicada en la Tercera Calle del Sector Rancho Chico de Puerto Cabello, estado Carabobo, momento en el que recibió una llamada de su amigo Eduardo Vargas diciéndole que se fuera a la cancha de básquet a jugar. Willy llegó a la cancha donde se encontró con su amigo Eduardo y unos niños para jugar basquetbol. Frente a esa cancha estaba un vehículo de color crema donde permanecían cuatro funcionarios de la Policía Municipal de Puerto Cabello, vestidos de civil.
Los funcionarios procedieron a entrar a la cancha y sacaron del lugar a Eduardo y a los niños que se encontraban junto a Willy. Luego, estos efectivos ordenaron a Willy que se agachara y uno de ellos sacó su arma de fuego disparándole en la zona intercostal izquierda. Willy les pidió a los funcionarios que no lo dejaran morir, mientras que el funcionario que efectuó el disparo sacó de un bolso un arma de fuego y se la colocó a Willy (le “sembró” el armamento). Posteriormente llegaron al sitio varios funcionarios de la Policía Municipal de Puerto Cabello y comenzaron a efectuar disparos por toda la cancha y las calles del Barrio Rancho Chico para simular un enfrentamiento.
Seguidamente, se llevaron al hombre herido en una patrulla y luego Willy apareció muerto en la Morgue del Seguro Social con dos disparos más y con signos de graves lesiones ocasionadas en la región bucal y en la dentadura producto de fuertes golpes recibidos con una pistola.
El padre de Willy, señor Wilmer Chirinos, había denunciado ante la Fiscalía 9ª, con anterioridad que su hijo estaba recibiendo amenazas de muerte por parte del funcionario policial Roel Díaz, por mantener un romance con su esposa. En la actualidad, el señor Chirinos exige justicia y denuncia también el retardo en la sentencia para los responsables y además afirma con preocupación que uno de los funcionarios implicado en el hecho, Bastidas Zárraga Erasmo José fue nombrado recientemente jefe de la Policía Municipal de Puerto Cabello.
5 años de lucha
– En octubre del 2013 se realizó la audiencia preliminar a cargo del juez, Neptaly Barrios Bencomo del Tribunal Tercero (3º) en Funciones de Control. En dicho acto el representante del Ministerio Público solicitó la admisión de la acusación y el enjuiciamiento de los 17 funcionarios activos de la Policía Municipal de Puerto Cabello. Mientras que en el año 2014 fue diferido el juicio más de una vez.
– 2015 ha transcurrido sin respuesta alguna para la familia Chirinos, ya que el 12 de febrero se suspendió el juicio por un Plan Cayapa. Luego de retomarse la audiencia en Tocuyito, esta fue diferida por la ausencia del alguacil sin conocerse un motivo específico. El 2 de agosto no compareció el fiscal, Alejandro Márquez debido a que no le llegó la notificación. El 11 de septiembre la jueza Rosa Matute se encontraba de reposo médico y tampoco hubo juicio. El 2 de octubre otro plan cayapa en Tocuyito intervino para que se no efectuara la audiencia y el 23 de octubre tampoco se realizó el juicio porque la jueza estaba enferma.
La La Red de Apoyo por la Justicia y la Paz se solidariza con el Señor Wilmer Ramón Chirinos Ovalles y su familia, y exige a la Jueza que se realice cuanto antes el juicio que ha sido diferido en reiteradas oportunidades, ya que de lo contrario estaría violentando el artículo 26 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.