La detención preventiva en Venezuela se ha convertido en un caos y uno de los graves problemas del sistema penitenciario venezolano, así el organismo encargado de garantizar el respeto a los derechos humanos de los privados de libertad, como es el Ministerio para el Servicio Penitenciario, pretenda escurrirse el bulto y buscar responsables de esta crisis a los que no son.
A manera informativa es importante que los lectores sepan que una persona que es detenida por funcionarios policiales cometiendo un delito, es llevada a centros de detención preventiva de estos cuerpos policiales, llámese comisarias, retenes, comandos policiales, etc. En estos recintos los detenidos deben permanecer las primeras 48 horas cuando es llevado ante un juez que en caso de dejarlo privado de libertad, decide cual es el recinto carcelario a donde debe ir esta persona, esto en los actuales momentos es simple teoría, nada se cumple.
La detención preventiva en Venezuela se ha sumado al caos que se vive ya desde hace mucho tiempo en todas las cárceles del país, solo basta darnos un paseo por las noticias y ver que solo en los últimos días en el retén policial de Carúpano 600 reclusos realizaron una huelga de hambre por las condiciones en que están recluidos, en Barquisimeto una riña entre reclusos dejo a 2 de estos decapitados y en el retén de menores de la misma entidad los jóvenes detenidos realizaron una huelga de sangre denunciando los maltratos que reciben por parte de los funcionarios de ese sitio, igualmente en la sede de la Policía del Táchira los reclusos secuestraron a 2 funcionarios policiales y 10 familiares que estaban de visita reclamando por sus condiciones de vida en ese recinto, al momento de escribir estas líneas este evento en Táchira aún se mantenía sin solución y llevaba ya 6 días de iniciado el conflicto.
El Defensor del Pueblo en uno de los pocos arranques de sensatez que tiene, reconoció esta crisis que se vive en los centros de detención preventiva y dio cifras importantes en este sentido, anuncio que en estos recintos habían 33 mil detenidos, de los cuales 27 mil se encuentran en sedes de policías estatales, municipales y nacional, 5 mil están en calabozos del CICPC, de todos estos detenidos hay 3 mil que ya están condenados y para el resguardo y custodia de estas personas se emplean un 30% de los funcionarios policiales.
Según datos previos de una investigación que estamos haciendo desde la organización que dirijo “Una Ventana a la Libertad”, le podríamos agregar a estas cifras de la Defensoría del Pueblo que estos reclusos están regados en aproximadamente 400 recintos a lo largo y ancho de todo el país con un hacinamiento extremo en todos y en algunos casos cifras alarmantes que superan el 1000%.
El problema del hacinamiento en los centros de detención preventiva al igual que en los recintos carcelarios es consecuencia de la mala política en materia penitenciaria que tenemos en Venezuela, hay que tomar en cuenta que mucho antes de que se creara el Ministerio para el Servicio Penitenciario se habían ofrecido la construcción de 25 nuevos recintos carcelario y solo se construyeron 3 (CP. Coro, Yare III y CP. Región Insular), igualmente la Ministra para el Servicio Penitenciario al inicio de su gestión, hace ya 5 años, ofreció la construcción de una cárcel para procesados en cada estado del país y hasta ahora solo ha hecho 2 (26 de Julio y CP. Fénix), convirtiendo estas promesas incumplidas en una de las principales causas del caos que se vive en la totalidad de recintos que albergan privados de libertad en el país.
Para que se den una idea de la gravedad del problema que vivimos en los recintos carcelarios venezolanos, les decimos que la capacidad aproximada en todos los centros de detención preventiva del país es de 8 mil reclusos y tenemos 33 mil, por otra parte en los centros penitenciarios del país hay un aproximado de 55 mil reclusos y su capacidad es solo para 20 mil. Tenemos una cifra de personas privadas de libertad que aproximadamente es de 83 mil personas donde solo hay una capacidad real para tener 28 mil, tenemos un excedente de 55 mil reclusos, cifra sin duda alguna alarmante.
No menos grave resulta que al menos un 30% de los funcionarios policiales del país están dedicados a cuidar presos, en vez de estar en las calles cuidando a la ciudadanía en uno de los países más peligrosos del mundo.
La situación es grave y el régimen nada hace para solucionarlo, el Ministerio Penitenciario solo ofrece y miente, pero no cumple y se niega a asumir que el caos que se vive en los centros de detención preventiva es su única y absoluta responsabilidad, al implementar mecanismos de acceso de detenidos a los recintos carcelarios bajo su mandato, con procedimientos arbitrarios e ilegales.
La situación cada día es más grave, no solo es el alto porcentaje de policías cuidando reclusos, sino que de continuar la situación llegara el momento que los cuerpos de seguridad no podrán detener a delincuentes porque no tienen dónde meterlos, el Ministerio Penitenciario tiene que dar respuestas a este caos pronto.
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@cnietopalma
