Carlos Nieto PalmaHoy quiero iniciar mi columna de todos los viernes, recordando al gran al gran escritor uruguayo Eduardo Galeano, quien en uno de sus poemas “Los Nadies” escribió algo que siempre he pensado que lo hizo recordando a los presos, dice Galeano “Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada. / Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la Liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos: Que no son, aunque sean. / Que no hablan idiomas, sino dialectos. / Que no hacen arte, sino artesanía. / Que no practican cultura, sino folklore. / Que no son seres humanos, sino recursos humanos. / Que no tienen cara, sino brazos. / Que no tienen nombre, sino número. / Que no figuran en la historia universal, sino en la crónica roja de la prensa local. / Los nadies, que cuestan menos que la bala que los mata”.

Más claro para expresar la vida de un privado de libertad en una cárcel venezolana, imposible, esos son nuestros presos “Los ninguneados”, los que valen menos que la bala que los mata, cualquier preso venezolano se puede ver reflejado en estas palabras.

Y ahora la situación ha empeorado, el sistema se ha creado de crear una nueva categoría de presos que están algarete, que nadie los quiere y viven hacinados en cuanto cuerpo policial, reten o comisaria usted se imagine sin derecho a una vida digna.

Establece el artículo 1 de la Ley de Régimen Penitenciario lo siguiente: “Corresponde al Ejecutivo Nacional, por órgano del Ministerio del Interior y Justicia, la organización y el funcionamiento de los centros de cumplimiento depenas privativas de libertad y los servicios que le son inherentes. El tribunal de ejecución velará por el correcto cumplimiento del régimen penitenciario”.

Igualmente el Reglamento de Internados Judiciales nos dice: “Corresponde al Ejecutivo Nacional, por órgano del Ministerio de Justicia, la creación, organización y el funcionamiento de los servicios carcelarios”.

Más claro imposible, los únicos responsables de los hombres y mujeres privadas de libertad en Venezuela es el Ministerio Para El Servicio Penitenciario, que al momento de su creación, hace ya cuatro años asumió las funciones del Ministerio de Interiores y Justicia que anteriormente tenían esa responsabilidad.

Resulta inconcebible que el Ministerio para el Servicio Penitenciario de manera descarada y violando toda la normativa legal, haya decidido evadir su responsabilidad y pasársela a los organismos policiales que nada tienen que ver con esto.

Los reclusos una vez detenidos y pasados a su audiencia de presentación en las 48 horas siguientes y es allí donde el juez decide a donde va a cumplir el detenido, básicamente en un organismo dirigido por el Ministerio Penitenciario.

Lamentablemente este ministerio ha tomado la arbitraria decisión de no aceptar a los reclusos en sus recintos y tienen los cuerpos policiales que asumir una función que no les corresponde y para la que además no están entrenados.

Entre las muchas razones que semejante disparate nos deja, es que tenemos a policías cuidando presos y por lo tanto no en las calles defendiendo a los ciudadanos del hampa.

Por cierto, la Ministra Penitenciaria, ha optado por cobrar a los organismos policiales la suma de treinta y cinco mil bolívares por una especie de kid que incluye colchoneta, uniformes, útiles de aseo personal y otras cosas más que no son competencia de los organismos policiales y en todo caso es el Ministerio Penitenciario quien debe cubrir con esos gastos.

El caos que a diario vemos en las comisarías, retenes policiales, etc., es única responsabilidad del Ministerio Penitenciario y su titular Iris Varela, que ha decidido tomar la ley por sus propias manos e imponiendo su ley.

Por eso quisimos escribir hoy de esta nueva categoría de presos, los olvidados, los nadies, los que nada valen, a ver si las autoridades se compadecen de esto.

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@cnietopalma

Artículo publicado en la página web del Diario “El Nacional” hoy 16/10/15

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